El país ha optado por no importar vacunas extranjeras y confiar en las suyas. Los expertos dicen que es una apuesta arriesgada, pero si resulta Cuba podría convertirse en referente geopolítico mundial sobre la pandemia.
La vacuna “Soberana 01”, producida y elaborada íntegramente en Cuba, comenzó los ensayos clínicos en humanos y se convirtió en la primera de América Latina en avanzar a esa segunda fase.