Por Ricardo López
Con vil descaro, aprovechando las fechas decembrinas, los políticos ruines hacen de las suyas para pasar desapercibidos volviendo a las andadas, pues no saben hacer otra cosa más que vivir del abuso a las arcas públicas.
En todo México, un sin fin de sátrapas están brincando a otros partidos, Cómo en Chiapas, donde un centenar de «fichas viles» están engrosando las filas de MORENA, y no sólo Chiapas, que hasta ahora es el más escandaloso suceso, en todo el país quieren estar bajo la protección de AMLO, el cual, si no se cuida adecuadamente, se verá rodeado de patanes, rateros y una que otra maravilla, dejándolo peor que como está. Ya vemos que aquí en Michoacán Fidel Calderón Torreblanca y Juan Pablo Arévalo Puebla, andan en lo mismo, por algo son los “perredistas morenos”.
Fidel Calderón ya declaró negándolo todo, pero es bien sabido sus intereses.
Otro más que en esta semana salió del basurero para reaparecer públicamente, fue el ex gobernador de Coahuila, el bandido Moreira, anunciando una candidatura local por parte del cartel del PRI, el cual deja ver a todas luces que premia con creces a DELINCUENTES de su partido, amparándolos a toda costa; quienes van por ese «premio» aquí en Michoacán, es el mítico Fausto Vallejo y sus hijos, Fausto Jr., amigo de otro baluarte del cinismo y corrupción como lo es Ernesto Núñez, alias «El Moches», y el tristemente célebre Rodrigo, alias el Gerber, amigo y compinche de Servando Gómez «La Tuta» de quien se desligó muy puerilmente diciéndose haber sido obligado. Caramba, los vídeos que le sacaron a nivel internacional dicen otra cosa.
No cabe duda que nosotros como mexicanos nos quejamos y criticamos una y mil veces todo este tipo de cobardes y asqueantes actos, sin embargo, estas lacras políticas siguen operando ante la poca o nula actividad su contra. Estos vividores políticos arropados por las leyes y el sistema actual político, pretenden seguir viviendo a nuestras costillas, a ver hasta cuando podremos como sociedad, actuar en contra de estos parásitos.
Es cuánto.
