Por: Ricardo López.
La mañana del pasado sábado 1 de septiembre, arrancó una nueva época gubernamental municipal, Raúl Morón Orozco tomó posesión del cargo como nuevo Presidente Municipal de Morelia, dando así inicio a una gestión política de inclusión, sin distingos de colores, basada en los perfiles experimentados del personal que ahora compone su gabinete, con la única finalidad de poder brindar la atención que la ciudad requiere y sus habitantes.
Era de esperarse el lleno que hubo en la Plaza Jardín de Morelos, popularmente conocido como “El Caballito” donde se dieron cita la ciudadanía, gremios sindicales, políticos y magisteriales para constatar el voto de confianza entregado el pasado 2 de julio en las urnas a la Coalición Juntos Haremos Historia.
Con una campaña austera y de bajo perfil, Raúl Morón logró el objetivo, demostrando que es con intelecto, sensibilidad y sentido común como se hace hoy en día la política social.
Ante las voces de sus críticos, donde predomina que fue el “Efecto AMLO” el que le dió el triunfo y “ganó de chiripa”, cuenta también la poca respuesta a la población con temas de carácter social y desarrollo, donde muchas promesas quedaron en eso, obras hechas “por tramitos”, aunado el poco sentido común que debió imperar antes de adornar un río de aguas negras o un tramo del Blvd. García de León, mientras que hay colonias donde nunca llegaron servicios prometidos o las obras quedaron a medias.
Una ciudad cuando tiene cubiertas las necesidades básicas, se puede pensar en embellecerla, sin embargo, fue al contrario. Así que podremos contar que no sólo fue el trabajo efectivo de bajo perfil, aunado al “efecto AMLO”, sino que también en gran cantidad pesó el enojo ciudadano, castigando con el voto.
Hoy, amaneció Morelia con una nueva esperanza, teniendo la certeza que podrán ser tiempos mejores a los pasados. Hoy, la imagen de la ciudad le corresponde al Generalísimo José María Morelos, liberal de gran prosapia, recordándonos a todos nosotros y a la nueva administración, que el servir al pueblo es un acto de honor, y que si no se cumple con honorabilidad y justicia, el pueblo lo demandará nuevamente; la esperanza vuela en el aire, se desean y anhelan tiempos mejores, para todos.
Es cuánto.
OPINIÓN // PROMETEO – “Más allá de una Esperanza”
