América Juárez Navarro
Morelia, Mich., María Victoria Romero Juárez y Reyna Barrera García tienen algo en común la lucha por encontrar sus hijos que desaparecieron hace ya varios años. Luis Alberto Morales Romero de Piedras Negras Coahuila y Luis Javier Hernández Barrera de Veracruz, se esfumaron sin dejar rastro, ni indicios de donde podrían estar; sin embargo, las madres sospechan que pudieron ser reclutados por el crimen organizado.
Luis Alberto Morales Romero de Piedras Negras Coahuila desapareció el 10 de agosto del 2010, cuando se dirigió a Monterrey para una entrevista de trabajo que vio por internet y nunca más regreso.
María Victoria Romero Juárez madre de Luis Alberto no pierde la fe, el Ministerio Público no descartó la posibilidad de que este reclutado por grupos criminales, tiene nueve años con nueve meses buscándolo, “ha sido una lucha cansada, he dejado mi trabajo, ya estoy cansada, no dejó de luchar porque quiero encontrarlo como quiera que sea, no me importa quien fue, quien se lo llevó, solo quiero encontrar, es como si hubiera sido ayer, el dolor el mismo”.

Sus hijos le han pedido que dejé la búsqueda de su hermano, que “ya no se martirice”, pero la respuesta de María Victoria es la misma, no porque es su hijo y le duele, y no descansara hasta encontrarlo.
Al enviar un mensaje a su hijo, le pide la espere: “que me espere, que yo voy a ir por él, no me importa cómo, no me importa dónde, pero voy por él, por sus niños que ya son unos jovencitos, los dejó siendo unos niños son unos jovencitos, que me espere, voy a ir por él.
Luis Javier Hernández Barrera desapareció hace siete años en Poza Rica Veracruz, está a punto de cumplir ocho años de no saber dónde se encuentra, Reyna Barrera García, madre de Luis se enteró de su desaparición cuando estaba en un estado de salud delicado que la puso al borde de la muerte, “mejor me hubiera muerto para no vivir en carne propia, esto porque es doloroso vivir esto”.

“El desapareció cuando iba a jugar un domingo, lo fueron a buscar en hospitales, en las cárceles y no lo encontraron, nunca llegó a jugar y paso a comprar un cigarro a la tendientita, después de seis años fui a reactivar la búsqueda y me dijeron no hay papeles, no sabía nada, tengo un año en esta caravana buscándolo”, relató la mamá de Luis.
Su corazón de madre siente que está vivo, la gente dice que está en Tepic Nayarit y lo cambiaron a otro lugar, según lo tienen reclutado, refirió la madre de Luis qué está desesperada.
“No sé qué le diría, le gritaría y le pediría perdón en que le descuide, qué paso con él, porque siempre daba consejo, no se me siento desesperada, ya son siete años y no tenerlo, voy de acuerdo en que se murió, haga de cuenta que estoy ciega, llorándole a los ciegos porque no sé dónde verlo, cuando lo daría gracias a dios por verlo yo, que me lo entreguen donde esté”, concluye la mujer que se abraza de otras de sus compañeras que sufren y padecen la misma pérdida.