América Juárez Navarro
Morelia, Mich., Sí al diálogo, pero con escucha, nunca más políticas apagafuegos, demandó al Gobierno del Estado y diputados frente a los conflictos que se viven en las comunidades indígenas, el sacerdote José Francisco Martínez Gracián.
El clérigo que fue reconocido por labor a favor de la paz en las comunidades purépechas, a través de la presea Melchor Ocampo, solicitó a los diputados locales y al Gobierno Estatal tres cosas:
“Nunca más políticas apagafuegos, mayores recursos para las instituciones educativas entre ellos la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo y la Universidad Intercultural Indígena de Michoacán y para todas y cada una de las comunidades más marginadas del estado, e incrementar de manera sustantiva las partidas para la investigación”, expresó.
Durante su intervención el clérigo dejó en claro que no viene a título personal, a recibir la presea, sino a nombre de todas las comunidades indígenas, quienes los han acompañado los últimos 45 años de su vida, y de las cuales ha conocido sus carencias que son muchas y reclamos de justicia, entre lo que se encuentra la invasión de los bosques y abuso de monocultivos, que desde hace 500 años se les ha ido cercenando.
Expuso que la tarea de sacar adelante al Estado de Ocampo, es tan inmenso que no se dará mientras no sea de la inclusión en la diversidad a los pueblos originarios.
Nacido en 1949 en Sahuayo Michoacán tienes formación eclesiástica, pero también se distinguió como joven revolucionario que participó en el movimiento del 68 pagando la defensa de sus ideas, con la reclusión.
La diputada Cristina Portillo durante su intervención destacó que hay una búsqueda de la digna unidad, donde caben todos, religiosos y laicos, y de igual forma en la lucha contra los grandes males del país como lo son la corrupción, la inseguridad y la miseria; todas y todos son necesarios, laicos y religiosos.
“Ocampo fue un hombre congruente, defensor de la libertad de credo, fue seminarista, más no un recalcitrante antirreligioso, como hoy de forma maniquea se le quiere desdibujar; se entregó a principios, más que a nomenclaturas vacías de contenido”, dijo la diputada local al enfatizar que Esa pasión de servicio y esa firmeza de convicciones es la que une a José Francisco Martínez Gracián con Melchor Ocampo.