Héctor Tapia
El gobernador Silvano Aureoles Conejo, dijo que el Partido de la Revolución Democrática (PRD), al cual pertenece, no puede seguir como va, “secuestrado por tribus”.
Esto, refirió ante los medios de comunicación, es lo que les ha llevado a una situación de inviabilidad como fuerza política.
Refirió que el partido del sol azteca está “perdido” en conflictos internos, en lugar de buscar alternativas a las problemáticas del país.
Así lo indicó en respuesta al cuestionamiento hecho sobre el proyecto o plataforma de Futuro 21, donde convocan principalmente figuras perredistas de carácter nacional, donde él se encuentra.
“Es falso que el PRD haya cedido o vaya ceder el registro, o que vaya a desaparecer, eso lo dicen los agoreros de la desaparición del PRD”, enfatizó el primer perredista del estado.
Fue aquí cuando insistió en que “el PRD no puede seguir como aún esta, secuestrada por tribus, con formas de tomar decisiones complejas, que nos llevó a una situación inviable como fuerza política perdido en conflictos internos, que en buscar como generar alternativas a la problemática del país”.
Lo que sí se hizo, explicó, es “un llamamiento de que queremos juntarnos con más; no he compartido nunca la tesis, de que puros y poquitos, quiero un partido que tenga vocación de gobierno, se actualice y encabece as causas que a la gente le preocupa”.
Cabe apuntar que ante la información que circuló, luego de la Primera Asamblea Nacional de Futuro 21, donde estuvieron figuras como Gabriel Quadri, o el ex priista José Narro, de que se prestaría el registro para que se conformara otro proyecto político a partir de esta nueva plataforma, la reacción de varios actores perredistas no se hizo esperar.
Hubo voces que rechazaron que se diera o se planteara siquiera esta opción para el partido; sin embargo, por otro lado, hay que recordar, el propio dirigente estatal del PRD, Juan Bernardo Corona Martínez, reconoció que hay voces al interior del partido del sol azteca, que apuestan y proponen que el partido cambie de nombre, de siglas y de color, aspecto que es rechazado también por otro sector del mismo partido.
