Redacción
Morelia, Michoacán, 08 de octubre del 2019.- Las alianzas comerciales entre Michoacán, Colima y Guerrero son muy importantes para explotar el potencial portuario del Pacífico; sin embargo, hacen falta políticas de atracción de inversiones que reactiven a las cadenas productivas y de comercio, propósito que se alcanzaría con la declaración de una Zona Libre Fronteriza en Lázaro Cárdenas, subrayó el diputado Alfredo Ramírez Bedolla.
A propósito de la firma del Acuerdo Estratégico Colima-Michoacán “Plataforma Logística del Pacífico Mexicano”, el legislador de Morena celebró la construcción de alianzas entre estados del Pacífico, ya que este tipo de acuerdos pueden ser un factor decisivo para que el Gobierno de México otorgue la declaratoria de Zona Libre Fronteriza a los municipios de Lázaro Cárdenas y La Unión, en Guerrero.
Gestor de que el Gobierno de México implemente una Zona Libre compartida entre Michoacán y Guerrero, Alfredo Ramírez refirió que los puertos de Lázaro Cárdenas y Manzanillo movilizan más del 20% de la carga que se mueve en el sistema portuario mexicano; sin embargo, subrayó que el aprovechamiento del Pacífico no se debe reducir a la explotación de su potencial logístico, sino también propiciar el desarrollo de clusters que atraigan industrias y empresas.
“Debemos tener cuidado de no impulsar sólo economías de paso que ensanchen las brechas de desigualdad social. El desarrollo económico debe ser equilibrado, echar raíces y dinamizar las economías locales, porque de no ser así, estaremos muy lejos de una posibilidad real de progreso”, recalcó el legislador.
Después de firmar alianzas con los estados de Guerrero y Colima, apuntó Ramírez Bedolla, Michoacán ha asumido una posición estratégica en la plataforma logística del Pacífico, por lo que el Gobierno de México debe considerar que la implementación de una Zona Libre Fronteriza en Lázaro Cárdenas sería poner en marcha el motor de la economía regional.
Añadió que los beneficios que ofrece el modelo de Zona Libre Fronteriza, como la disminución del IVA e ISR, precios más baratos en combustibles, aumento del salario,e inversión en infraestructura pública de manera complementaría, atraerían a inversionistas, pondrían en movimiento a cadenas productivas, comerciales y de servicios, además de fortalecer el poder adquisitivo de los habitantes de las zonas de influencia.
En su análisis para determinar si es factible implementar una Zona Libre Fronteriza en Michoacán, el Gobierno de México debe considerar que esta política no solo beneficiaría a Michoacán y Guerrero, sino a las regiones del Pacífico, Centro, Bajío, y Occidente, que en conjunto aportan el 22 por ciento del Producto Interno Bruto Nacional, concluyó Ramírez Bedolla.
