América Juárez Navarro
Morelia, Mich., Apoyar a un Gobierno que se debilita cada día más y eso es lo más duro y lo más difícil, llamó el Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis de Morelia, Juan Espinoza, al señalar que tras lo ocurrido en Culiacán Sinaloa quedó demostrado y manifestado la debilidad de nuestro Gobierno, la falta de estrategia, de un armamento fuerte que pueda poner también un alto a la inseguridad, lo cual mencionó es triste y preocupante.
A decir del presbítero no solo la autoridad debe reaccionar, sino todos los ciudadanos, no solamente señalando lo que le falta al Gobierno fue el que se eligió y votó, y si bien admitió es una autoridad que quizás no esté respondiendo a las necesidades y a todas las cosas que están aconteciendo, confió en que no siga la propagación de los mismos.
El obispo también habló de Michoacán en el caso Aguililla, donde lamentó que los pobres policías por un salario mínimo dan su vida y están desprotegidos, en este tenor también hizo una invitación para que desde el evangelio a “los hermanos que están matando a sus hermanos, a esos que no tienen compasión, que les interesa más el dinero y ciertas cosas, sientan este llamado a convertirse a cambiar el corazón”, insistió.
Afirmó que México necesita cambios, pero sus cambios, sostuvo se deben hacer desde el diálogo en la comprensión de la mirada a los más pobres, pero no como carnaza, no para utilizarlos, sino del esfuerzo del ayuda de aquellos que pueden proteger a México, porque consideró que la violencia tiene su origen en la pobreza, en esa sobrevivencia.
“Todo eso (la violencia) es fuente de una gran injusticia y una estructura injusta que hace que exploten como volcanes estos momentos de violencia, esas son las de las líneas que han seguido y el diálogo entre los cabecillas de la violencia y de los del Gobierno y el tratar de reunir se de hacer un convenio, pero que está sostenido desde la base atacando las causas”, indicó.
El sacerdote evitó pronunciarse respecto así México es un Estado Fallido, y expuso que cualquier persona que esté al frente del Gobierno tiene un gran desafío, “el momento que vivimos en México para cualquier Gobernante de cualquier partido es un gran desafío y es un gran reto, y es muy fácil echar la culpa a quién tiene la autoridad pero la culpa la tuvimos todos los que dimos nuestro voto de confianza y a todos nos toca poner nuestro granito de arena”, insistió.
Reiteró su postura de hacer un llamado a la gente a que despierte e interese por México y nuestro estado, y hacer que si el Gobierno no está respondiendo a ciertas realidades, que se alce la voz.
