Por Héctor Tapia
Desde que comenzaron a perfilarse los aspirantes o posibles candidateables al gobierno del estado por las distintas fuerzas políticas ha prevalecido algo: la ausencia o número reducido de mujeres como figuras posibles a ésta postulación.
Las distintas mediciones que se han realizado apenas si contemplan algunos nombres; sin embargo, siguen siendo las menos. No es un tema de capacidades. Es simple y llano posicionamiento, o quizá una omisión deliberada tanto de los partidos como de las mismas encuestadoras.
En el juego de la percepción, lo cierto, es que son pocas las que apenas figuran como aspirantes, aspecto que también podría ajustarse conforme se acerquen los tiempos; pero sí tienen que enfrentarse con el arranque que hicieron ya las figuras de hombres, que tienen meses en la carrera por colocarse como la opción a las candidaturas por sus partidos, o por otros.
Pero veamos, qué políticas mujeres comienzan a sonar y a aparecer en las mediciones, así como también en radio pasillo, para competir por tan importante cargo.
Por Morena está Selene Vázquez Alatorre, que de origen perredista, pasó a buscar competir por el PT, y ahora ha manifestado claramente su interés por la vía del partido del presidente, aunque no queda claro si es o no militante.
Están también Fabiola Alanis Sámano, quien fuera dirigente estatal del PRD, y que antes del proceso electoral pasado se sumó al proyecto de la llamada Cuarta Transformación; así mismo está la Senadora Blanca Piña Gudiño; ambas figuras políticas no han manifestado claramente si quieren o no la candidatura, pero comienzan a sonar, y apenas, a aparecer en algunas encuestas.
Por el PRI, el segundo partido más votado en Michoacán, en el proceso electoral pasado, la única mujer visible para la candidatura al gobierno michoacano, y que aparece en las encuestas, es la legisladora local Adriana Hernández Íñiguez, quien no sale tan mal evaluada. Figuras como Daniela de los Santos Torres ha comenzado a aparecer su nombre, pero más perfilándose por la alcaldía moreliana.
Por el PRD, partido en el gobierno, el dirigente estatal Juan Bernardo Corona Martínez, ha referido ya a dos nombres de mujeres: Silvia Estrada Esquivel, quien fuera integrante del gabinete de Silvano Aureoles como contralora, y posterior Jefa de Gobierno en Lázaro Cárdenas, y la legisladora local Araceli Saucedo Reyes, quien se sabe tiene más interés en buscar una presidencia municipal en la siguiente contienda. Fuera de ellas, no se sabe de otras mujeres que tengan esta intención.
Por Acción Nacional, en su momento se llegó a plantear a Rosa Hilda Abascal, quien llegó a ser funcionaria en el periodo de gobierno de Lázaro Cárdenas Batel, y aunque fue “rescatada” prácticamente del olvido, lo cierto es que no se le ve activa en este momento haciendo trabajo político.
Hay partidos que todavía no “toman color” o ruta de a quienes podrían perfilar, y menos han dejado ver si postularán a alguna mujer. Entre ellos están el Verde Ecologista, el Partido del Trabajo y Movimiento Ciudadano, sin contar los que todavía alcanzarían la categoría de nuevos partidos políticos nacionales, que están a la espera de lo que defina el Instituto Nacional Electoral (INE)
Ahora, en la ruta de definiciones también afectará si los partidos deciden ir en coalición, porque al momento de convenirlo tendrán o pondrán tanto las reglas de la alianza como también a consideración sus respectivos perfiles, así como también la posibilidad de abrir sus candidaturas a personas, hombres o mujeres, que sean externos y sin filiación partidaria.
Al ser figura única la gubernatura del estado no demanda o exige postulación paritaria, por tanto lo establecido por la legislación en la materia alcanza sólo a alcaldías, congresos locales, federales, gabinetes de gobierno, partidos políticos, pero no para la gubernatura ni presidencia de la república.
A partir de ello, lo que se esperaría de los partidos políticos, y próximamente las coaliciones, es que para la gubernatura del estado si bien legalmente no estarían obligados a impulsar a una mujer o un hombre al proceso constitucional, si podrían de manera interna, promover la paridad en sus métodos de medición, elección o definición de candidato o candidata, al gobierno michoacano. Es decir, a partir de la voluntad política de integrar en las mediciones a todas esas mujeres que levanten la mano, quienes desde ahora van cuesta arriba por aparecer en el abanico de posibilidades. Habrá qué ver qué postura asumen los partidos, quienes también valorarán entre los perfiles de las mujeres, posicionamiento, y otra serie de factores para poder ser competitivos en el siguiente proceso electoral.
