Por: Oscar Guerrero / Metapolítica
El gobernador Silvano Aureoles Conejo hará llegar al Congreso del Estado una propuesta que tiene por objeto establecer el uso obligatorio de cubrebocas en la entidad, como parte de las acciones que el perredista echará a andar en la segunda fase de la “nueva convivencia” por COVID-19.
Lo anterior fue anunciado por el gobernador del estado a través de un mensaje difundido en redes sociales, donde también advirtió que quien no se ajuste a las medidas que su administración ejecutará en esta segunda fase de la pandemia en Michoacán, será sujeto a sanciones que omitió especificar.
A esta medida se sumarán otras como: “controlar los espacios públicos y cancelar todos los eventos masivos como ferias, jaripeos, posadas, peregrinaciones; el cumplimiento estricto de protocolos en tianguis, mercados y el comercio en general, y la restricción de horarios y días en bares y restaurantes; el apego a protocolos en empresas, hoteles y restaurantes en donde el número de personas no debe de rebasar el 50 y 75 por ciento, dependiendo de la capacidad del lugar y del giro al que corresponda”.
Aureoles Conejo llamó a que las autoridades municipales sigan reforzando sus protocolos de seguridad sanitaria, principalmente en aquellos que mayores casos de COVID-19 se registran: Morelia, Uruapan, Zamora, Lázaro Cárdenas y Zitácuaro.
“Seamos claros, la epidemia no terminará en los meses siguientes. Por lo tanto, si Morelia y su autoridad municipal se siguen descuidando, las repercusiones serán para todo el estado”, condenó en su mensaje al insinuar que el ayuntamiento capitalino no se está ajustando a las medidas que demanda la pandemia del COVID-19.
Por último, Silvano presumió que la reactivación económica de la entidad se mantiene en un 50 por ciento, lo cual, dijo, ha posicionado a la entidad entre los tres estados que menores repercusiones económicas han sufrido a causa del coronavirus.