Por: Oscar Guerrero / Metapolítica
El gobernador Silvano Aureoles Conejo impugnará tanto el esquema presupuestal con que se rige el Estado, a través de la Ley de Coordinación Fiscal actual; como el presupuesto federal para 2021, cuyo contenido todavía está sujeto a modificaciones por parte de la Cámara de Diputados.
Así lo advirtió el perredista, para luego reconocer que difícilmente se podrían generar modificaciones sobre el proyecto presupuestal que promovió el presidente Andrés Manuel López Obrador, a quien le recrimina una supuesta intención de someter, en términos económicos, a los estados y municipios del país.
“A ver cómo le hacen los diputados que votaron allá (en la Cámara de Diputados) a favor de que le quitaran dinero a Michoacán; michoacanos que la gente los eligió para representar allá, y que mejor se fueron a hacer otra cosa”, sentenció, a un año de ceder la batuta en el Ejecutivo estatal.
Silvano Aureoles cuestionó la manera en que se condujeron los legisladores que aprobaron el PEF 2021, a quienes, cuestionó: “no sé cómo le van a hacer los compañeros diputados locales acá, o cómo le van a responder a los michoacanos en un escenario tan complejo, con menos dinero”.
Amagó con acudir a tribunales por la reconfiguración que sufrieron los fideicomisos en el país, así como por los considerables recortes presupuestales que, aseguró, sufrirán los municipios y estados en el ejercicio fiscal venidero.
Un punto a destacar es que, mientras Silvano Aureoles augura un recorte superior a los siete mil millones de pesos para Michoacán, los legisladores federales que representan al estado aseguran que éste sería apenas superior a los dos mil millones de pesos, lo cual representaría una disminución del 4 por ciento, con respeto a 2020.
