Metapolítica
Morelia, Michoacán.- Una investigación con posibles sanciones anunció esta mañana el presidente Andrés López Obrador tras destaparse un caso de “influyentismo” en la vacunación contra el COVID-19 en un hospital de Rayón, en el estado de México.
Aunque el presidente evitó dar nombres, se trataría del doctor José Rogel Romero, director del Centro Médico Adolfo López Mateos, y sus familiares. Todos ellos tuvieron acceso a la vacuna en el primer lote que llegó al país el 23 de diciembre y se aplicó a personal hospitalario.
“Ayer una compañera hizo una denuncia porque en un hospital de Rayón, Estado de México, se había vacunado una familia. Se le echaba la culpa al Ejército, porque se trataba de personal militar”, dijo AMLO.
En rigor se refería a la denuncia de una reportera de El Universal, quien le expuso la situación al presidente durante la conferencia matutina del día 29 de diciembre.
“Se hizo la investigación”, dijo AMLO, “y en efecto una familia, a la que no le correspondía, llegó y con influyentismo se vacunaron. Un médico, su esposa, y creo que una o dos de sus hijas. No diré los nombres porque eso corresponderá a la investigación que ya se inició para castigar esta irregularidad”.
Y llamó a denunciar estos hechos.
“Quiero agradecer a este medio de información por la denuncia, y pedir a toda la gente que nos ayude denunciando todos estos abusos”.
Finalmente, apeló a la conciencia de los mexicanos.
“No es un asunto de una sola mujer o un solo hombre, o de un solo servidor público. Es asunto de todos, para poder frenar, detener, cortar de tajo el influyentismo. Es un vicio, un mal habito que viene de lejos. Tenemos que luchar todos por una sociedad mejor”.