Metapolítica
Morelia, Michoacán.- La zona fronteriza entre Guanajuato y Michoacán está convertida hoy en un verdadero corredor de la muerte.
Los municipios guanajuatenses de Salvatierra, Acámbaro y Cortázar han sido, en el último tiempo, los que más fosas clandestinas han presentado tras las investigaciones de corporaciones policíacas y organismos nacionales de derechos humanos.
Michoacán recibe directamente parte de la violencia desatada en Guanajuato: los tres municipios mencionados se ubican respectivamente a 183, 79 y 84 kilómetros de Parácuaro, pueblo guanajuatense situado casi exactamente en la frontera con Michoacán.
La información sobre las cifras de muertes fue dada a conocer este día por la titular de la Comisión Nacional de Búsqueda de personas desaparecidas, Karla Quintana. La proyección respecto de la cercanía con Michoacán está disponible en cualquier mapa físico o virtual.
Según los datos oficiales, Salvatierra y Acámbaro se ubican entre los 10 municipios con el mayor numero de fosas clandestinas y cuerpos recuperados a novel nacional. Lo más dramático: la mayor parte de los cuerpos recuperados pertenece a jóvenes, y son de data reciente.
“Desde la Comisión Nacional de Búsqueda de personas desaparecidas hemos estado presentes desde hace mas de un año en Guanajuato” dijo Quintana en la conferencia mañanera de hoy. “Desde mayo del año pasado hicimos el primer hallazgo.
“Entre el 20 de octubre y el 17 de diciembre del 2020 hubo tres hallazgos de fosas masivas”, detalló. “En Salvatierra hubo 65 fosas clandestinas con 79 cuerpos. En Cortázar se encontraron 50 cuerpos, de ls cuales fueron identificados 15. Y en Acámbaro se identificaron 37 fosas clandestinas que contenían 75 cuerpos”, dijo la experta.
MICHOACÁN EN LA LISTA DESHONROSA
Pero no solo la frontera con Guanajuato es un corredor de la muerte. Michoacán es uno de los cinco estados mexicanos con más fosas clandestinas.
“Los estados que concentran el mayor número de cuerpos recuperados en fosas clandestinas, un dato que estamos dando por primera vez de manera puntual, son Jalisco, Guanajuato, Colima, Michoacán y Zacatecas” dijo el Subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas.
Todos estos estados, detalló, concentran el 79.5 % del total de los cuerpos recuperados de diciembre del 2018 a diciembre de 2020, dijo Encinas.
En Michoacán, el gobernador Silvano Aureoles ha admitido en distintas ocasiones que los homicidios dolosos están fuera de control, si bien lo ha atribuido a la delincuencia organizada y afirmado que por su naturaleza el tema le compete a la administración federal.
En el caso de Guanajuato, el gobernador Diego Sinhué Rodríguez ha sido abiertamente cuestionado por convertir a uno de los estados otrora más tranquilos del país en un cementerio a cielo abierto. Y el propio gobernador admite sus culpas: el pasado 15 de julio, durante una visita presidencial, Sinhué Rodríguez admitió ante López Obrador: “reconozco que me equivoqué”.
