Oscar Guerrero / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- Al menos 10 centros de reconversión sexual, disfrazados de anexos o retiros espirituales y de superación personal, están operando en contra de los derechos de la comunidad LGTBIQ+, mediante la imposición de parámetros que se pretenden establecer para limitar las preferencias sexuales de la sociedad moreliana.
Esto fue denunciado en el marco del Día Internacional del Orgullo LGTBIQ+ por parte del presidente del Frente Michoacano de la Diversidad Sexual, Juan Manuel Parra Zambrano, quien, en un evento conmemorativo organizado por el Ayuntamiento de Morelia, a través del Instituto de la Juventud Moreliana (IJUM), condenó que haya organizaciones que se pretendan imponer en contra de los derechos de la comunidad.
Al dar a conocer la existencia de estos centros, subrayó lo dañinas que son las terapias de reconversión o reparación sexual ECOSIG, ya que, entre algunos de los métodos, dijo, se encuentran violaciones grupales o incluso violaciones masivas de personas, torturas, medicaciones innecesarias, daños psicológicos irreparables, entre muchos otros métodos brutales contra personas homosexuales.
Incluso, las polémicas prácticas que se llevan a cabo en este tipo de terapias están en la mira del Poder Legislativo en diferentes partes de la República, a consecuencia de que se reconoce que nadie puede influir en las preferencias sexuales de la ciudadanía, y mucho menos a través de procesos terapéuticos que resultan dañinos para el paciente.
Impera discriminación
A propósito de la conmemoración del Día Internacional del Orgullo LGTBIQ+, Juan Manuel Parra subrayó que, pese a los esfuerzos que han imprimido diferentes colectivos y organizaciones, la comunidad sigue estando expuesta a tratos violentos y discriminación “por parte de una sociedad que se resiste a respetar la libertad de preferencias sexuales”.
En este sentido, subrayó que, con base en un estudio realizado por la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), nueve de cada 10 integrantes de la comunidad LGTBIQ+ se han enfrentado a diferentes tipos de discriminación.
“El respeto a los derechos de la comunidad LGTBIQ+ sigue representando un problema, porque son muchos los casos de violencia y discriminación que giran en torno a la libertad de preferencias sexuales, por lo que resulta necesario fortalecer programas de concientización en la ciudadanía, para flexibilizar la manera de pensar de nuestra sociedad”, concluyó.