Oscar Guerrero / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- De cara a la transición gubernamental que está por consumarse en Michoacán, el titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), Adrián López Solís, aspira a establecer una “relación institucional” con el gobernador electo, Alfredo Ramírez Bedolla, a partir de que este asuma la titularidad del Ejecutivo estatal.
En entrevista colectiva, subrayó que su “aspiración es que sea una relación institucional, donde la Fiscalía tenga las condiciones para cumplir con la función que le da la ley”.
Al ser cuestionado sobre si teme que con la llegada de Alfredo Ramírez pueda ser removido del cargo, López Solís esquivó cuestionamientos y subrayó que se mantendrá en el cargo mientras haya condiciones para ello.
“No se trata de una cuestión personal, se trata de cumplir con un papel que mandata la ley, y que hoy por hoy corresponde a su servidor desempeñar y hasta en tanto haya las condiciones para ello, lo voy a estar haciendo con toda la firmeza que se necesita”, subrayó el fiscal de Michoacán y exsecretario de Gobierno de Silvano Aureoles.
En caso de que con la llegada de Ramírez Bedolla al poder también lleguen denuncias por posibles inconsistencias administrativas en el gobierno de Aureoles Conejo, el titular de la FGJE dijo que el seguimiento a ese tema recaerá en la Fiscalía Estatal Anticorrupción.
Las declaraciones de Adrián López Solís se generaron a unas horas de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) defina si se ratificará o no el triunfo de Ramírez Bedolla en la contienda por la gubernatura.
