Metapolítica
Morelia, Michoacán.- Comuneros de Arantepacua se apostaron frente a las instalaciones de la Fiscalía General del Estado de Michoacán (FGE) para exigir justicia por las cuatro personas asesinadas por elementos de seguridad estatal en 2017, pero luego entraron a las oficinas de la fiscalía para destruir mobiliario de las oficinas y demás artículos.
Los pobladores de la comunidad han acusado al fiscal general michoacano, Adrián López Solís, de colaborar en la represión a comuneros en Arantepacua, ya que entonces fungía como secretario de Gobierno del gobernador Silvano Aureoles Conejo.
El 5 de abril de 2017, elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) llegaron a Arantepacua, municipio de Nahuatzen, con la orden de recuperar alrededor de 20 unidades secuestradas por habitantes de la región, los cuales mantenían un conflicto de posesión de tierras con Capácuaro, Paracho. Versiones encontradas dicen que los elementos fueron atacados a balazos dando origen a un enfrentamiento, pero otras versiones indican que los uniformados actuaron de forma represiva.
El saldo fue de cuatro muertos, entre ellos un menor de edad, y varias personas heridas.
En las imágenes de la protesta de este día se observa al contingente salir desde Casa Michoacán para dirigirse a las oficinas de la FGE, donde lanzaron protestas antes de irrumpir en el interior.
Los trabajadores de la fiscalía salieron de las instalaciones, en cuyas ventanas los protestantes escribieron consignas.