Gustavo R. Gallardo / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- Ayer, durante su estancia en el estado de Guerrero como parte de su gira de fin de semana, el presidente Andrés Manuel López Obrador fijó una postura en torno a los ataques de los que fue víctima su hijo menor Jesús Ernesto por su físico.
El mandatario dijo entender el motivo por el cual sus adversarios atacan a su familia: “Es su grado de desesperación, porque no pueden. Ellos no le tienen amor al pueblo, por eso no pueden”.
Y añadió: “Imagínense, ayer mi pobre hijo, que lo amo, Jesús, está excedido de peso, ya saben ustedes, la edad de la adolescencia cómo es. Sale una foto y con saña lo atacan. Eso es una cobardía. Si el problema es conmigo, no con él”.
Entonces, dijo: “Hasta en las verdaderas mafias se respeta a la familia. ¿No es así?”.
López Obrador dijo que aunque sigan “las campañas negras, las calumnias, vamos a salir siempre ilesos”.
