Héctor Tapia / Metapolítica
Con la publicación del Plan B, o paquete de reformas legales en materia electoral a nivel federal, el Instituto Nacional Electoral (INE) mejorará su transparencia, y disminuirá el costo que representa, aseveró Reginaldo Sandoval Flores, diputado federal por el Partido del Trabajo.
Destacó que, si bien se pretendía una reforma constitucional, finalmente sólo pudieron pasar las reformas legales, mejor conocidas como Plan B, y que aún con esto, aseveró, el INE se convertirá en un instrumento ciudadano en el sistema democrático del país.
En conferencia de prensa virtual, Sandoval Flores dijo que la discusión sobre el Plan B ha generado una “polarización en la narrativa”, que ha llevado a que el consejero presidente del INE, Lorenzo Córdova, y el consejero electoral Ciro Murayama, “se conviertan en promotores” de la marcha donde se defiende la democracia, a consideración de ellos.
De manera paralela, dijo, se va caminando en el proceso de designar 4 consejeros electorales más, dado que en abril salen o dejan de fungir como consejeros 4 personas, “y se tiene que trabajar en esos nombramientos”, explicó.
Ante esto, dijo que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) está violentando la norma al pronunciarse porque sea una mujer la que tendrá presidir ahora el INE; la norma, dijo, “establece que es atribución exclusiva del congreso el procedimiento para nombrar a los consejeros”.
“Pidiendo que se nombre una presidenta mujer, lo que está mal es el procedimiento que hace el tribunal, confundiendo paridad de género con alternancia de género, lo que está legislado es la paridad no alternancia”.
Sobre el Plan B, dijo Reginaldo Sandoval, “vamos a echarle ganas para disminuir el costo financiero que representa el órgano electoral con los sueldos altos y el despilfarro que tiene el INE; porque del presupuesto que se les da ‘se comen’ en la ruta administrativa el 80%, y se tiene que adecuar esa dirección”.
Aquí dijo que si bien no se logró la reforma constitucional que pretendía una restructuración total del órgano (INE), “sólo estamos logrando la ley secundaria, por eso se llama el plan B; creo que va a mejorar en términos de costo, transparencia, y claridad de que se convierta en un instrumento ciudadano, que represente el instalar la plena democracia en México y mandemos al basurero de la historia la intervención de gobernadores, alcaldes, el presidente de la república, de los poderes fácticos que no ayuda a la democracia”.
