Héctor Tapia / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- Ante las observaciones hechas por la Auditoría Superior de Michoacán (ASM) a las obras de los distribuidores viales de la salida a Salamanca y a Mil Cumbres, el Gobierno estatal se dijo listo para aportar la información que sea necesaria sobre el uso de los recursos de ambas obras contratadas por la administración pasada y en las que la actual detectó diversas irregularidades, aseguró el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla.
Entre estas irregularidades detectadas está el haber entregado adelantos de recursos muy superiores a los avances físicos que presentaban las obras al momento de ser atendidas por el actual Gobierno de Michoacán.
Ramírez Bedolla dijo con tono enfático que ambos distribuidores viales fueron licitados por el gobierno anterior que encabezó Silvano Aureoles Conejo, licitaciones sobre las cuales, desde el principio, se advirtieron irregularidades.
“Normalmente, cuando se gana una licitación puede o no haber anticipos, no es por norma. De otorgarse, este nunca puede ser mayor al 30% [de lo presupuestado], y en estas dos obras los anticipos estuvieron muy por encima de este techo”, aseveró el mandatario michoacano.
“Esto ocurrió en la administración anterior y estamos listos a dar respuesta a lo solicitado”, remarcó Ramírez Bedolla, y apuntó que la prioridad desde que inició su gobierno fue que estas obras se concluyeran, lo que requirió “todo el esfuerzo legal, financiero, en acuerdo con las empresas”.
Con todo esto, sólo la obra de la salida a Mil Cumbres es la que concluyó 100% la infraestructura vial para dejarla lista al tránsito vehicular; caso contrario al de la salida a Salamanca, por la cual se rescindió el contrato a la empresa a la que se le adjudicó, porque estaba requiriendo más recursos para concluir los trabajos, pese a que, explicó el gobernador, “ya debía 114 millones de pesos del anticipo que no comprobaba que estuvieran reflejados en la obra”.
“Estamos listos para contestar al Congreso o Auditoría por estos temas, y sí, efectivamente hubo irregularidades; siempre hubo pagos anticipados que no se reflejaban en los avances físicos”, reiteró.
El titular de la Secretaría de Comunicaciones y Obras Públicas (SCOP), Rogelio Zarazúa, dijo que, en el caso de la salida a Mil Cumbres, la postura del gobierno michoacano “es no dejar sólo así la obra”, sino que se piensa en un componente adicional que contempla pasos peatonales y mejoramiento urbano.
Ese distribuidor vial, añadió el titular de SCOP, se recibió con 47% de avance, y que fue concluido un año y cinco meses después del inicio del actual gobierno.
En esa obra se programó una inversión de 422 millones de pesos, y el gobierno de Silvano Aureoles dio un adelanto para la obra de 243 millones de pesos.
“Tocó estar presionando a las empresas para que avanzaran en las obras; estamos en proceso de finiquito, en revisión de la misma, este proceso se espera que en breve entre la Secretaría de Desarrollo Urbano y Movilidad” con la siguiente fase que es el mejoramiento urbano y pasos peatonales, explicó el funcionario estatal.
Para el caso particular de la obra de la salida a Salamanca, dijo Rogelio Zarazúa, se le programó una inversión de 487 millones de pesos, y se dio un anticipo de 243 millones de pesos; a la empresa que había ganado la licitación se le rescindió el contrato, y una vez que se reanudaron los trabajos, añadió, consiguió un avance físico del 87%, cuando al inicio de la administración había un avance del 78%.
