Luego de casi 60 años, Cuba cerrará el capitulo con la dinastía de los Castro al frente de la isla caribeña, pues mañana jueves sería ratificado de manera oficial a Miguel Díaz-Canel como nuevo Presidente.
Díaz-Canel, que es el Vicepresidente de Cuba, es un personaje más bien moderado y de perfil bajo, conocido como el favorito de Raúl Castro. Este miércoles fue presentado como el único candidato ante la Asamblea Nacional del Poder Popular.Los parlamentarios votarán este miércoles la candidatura de Díaz-Canel y el resto de los miembros del Consejo de Estado, aunque el resultado no se dará a conocer hasta este jueves.
El virtual nuevo Presidente, nació en 1960, un año después del triunfo de la revolución que encabezó Fidel Castro, es ingeniero electrónico de profesión y en 1994 inició su carrera política como primer secretario del Partido Comunista Cubano.
El 24 de febrero de 2013 fue nombrado primer vicepresidente de los consejos de Estado y de Ministros en sustitución de José Ramón Machado Ventura -uno de los dirigentes históricos-, quien cedió su asiento para dar paso a la “nueva generación”.
Es recordado, en sus inicios, como un dirigente político abierto, dando apoyo a un centro cultural donde se hacía travestismo y por su toque rockero. Actualmente, analistas especializados en Cuba reconocen un discurso apegado al partido, un personaje de bajo perfil pero señalado como “potencial reformista” que a la vez intriga.
Desde Washington, advierten que no esperan un cambio radical con la llegada de Díaz Canel. De acuerdo con la Oficina de Washington para Latinoamérica (WOLA) no considera que Díaz-Canel, vaya a suponer un cambio dramático e inmediato en la forma de gobernar el país.
“No debemos esperar cambios dramáticos en la escena inmediata”, explicó Marguerite Jiménez, directora de WOLA para Cuba, durante una conferencia telefónica, de acuerdo con una publicación de la agencia Efe.
En esta línea, Jiménez precisó que aunque no es previsible que el nuevo mandatario dé un giro brusco en la dirección del país, sí que tendrá que acometer reformas importantes en materia económica y social durante los próximos años.
Por un límite legal establecido por Raúl Castro, Díaz-Canel podría gobernar un máximo de dos mandatos, diez años. Hasta 2021 se prevé que Castro permanezca como secretario general del partido.
El virtual nuevo Presidente, nació en 1960, un año después del triunfo de la revolución que encabezó Fidel Castro, es ingeniero electrónico de profesión y en 1994 inició su carrera política como primer secretario del Partido Comunista Cubano.
El 24 de febrero de 2013 fue nombrado primer vicepresidente de los consejos de Estado y de Ministros en sustitución de José Ramón Machado Ventura -uno de los dirigentes históricos-, quien cedió su asiento para dar paso a la “nueva generación”.
Es recordado, en sus inicios, como un dirigente político abierto, dando apoyo a un centro cultural donde se hacía travestismo y por su toque rockero. Actualmente, analistas especializados en Cuba reconocen un discurso apegado al partido, un personaje de bajo perfil pero señalado como “potencial reformista” que a la vez intriga.
Desde Washington, advierten que no esperan un cambio radical con la llegada de Díaz Canel. De acuerdo con la Oficina de Washington para Latinoamérica (WOLA) no considera que Díaz-Canel, vaya a suponer un cambio dramático e inmediato en la forma de gobernar el país.
“No debemos esperar cambios dramáticos en la escena inmediata”, explicó Marguerite Jiménez, directora de WOLA para Cuba, durante una conferencia telefónica, de acuerdo con una publicación de la agencia Efe.
En esta línea, Jiménez precisó que aunque no es previsible que el nuevo mandatario dé un giro brusco en la dirección del país, sí que tendrá que acometer reformas importantes en materia económica y social durante los próximos años.
Por un límite legal establecido por Raúl Castro, Díaz-Canel podría gobernar un máximo de dos mandatos, diez años. Hasta 2021 se prevé que Castro permanezca como secretario general del partido.