Héctor Tapia / Metapolítica
Aun cuando ha iniciado el proceso de liquidación del Partido Encuentro Solidario (PES) en Michoacán, este partido local está a la espera de la resolución de algunas impugnaciones o la posibilidad de alguna elección extraordinaria que le permita recuperar entre 5 y 6 mil votos que le permitan sostener el registro que está por perder de manera oficial.
Esto lo refirió Eder López García, dirigente estatal de ese instituto político, uno de los cuatro partidos locales que están en vías de perder su registro en Michoacán, a partir de los resultados que obtuvieron en la jornada electoral de este 2 de junio pasado, donde no alcanzaron el 3% mínimo que establece la ley para continuar reconocidos como partidos locales.
La pérdida del registro es una posibilidad, pero no es un hecho consumado, remarcó en un mensaje emitido en las redes sociales del partido; en este contexto aseveró que en el proceso electoral se dieron “muchas cosas que estuvieron fuera de nuestro alcance”, con las repercusiones ya vistas al momento.
La situación que enfrenta actualmente el PES, dijo, no es la que se esperaba, dado que lo que se vivió fue “una elección atípica en muchos sentidos”.
Ante esto aseveró que no busca quitarse “con ligereza las responsabilidades que están bajo mi control”, y reconoció que el principal responsable es él, “porque soy el presidente del partido y así tiene que ser”.
Ante lo que se enfrenta, dijo, no se pretende explicar “el por qué pasaron las cosas” o en los errores que pudieron haber cometido, “en todo caso, ante las especulaciones, si se quiere un responsable, estoy para poner la cara y asumir lo que se tenga que criticar sobre esta situación”.
López García dijo que se seguirá manteniendo en la vida pública del estado; “con o sin registro seguiremos incidiendo en la vida pública del estado y del país “.
“Puede ser que en alguna elección extraordinaria podamos acceder a esos votos que hacen falta”, añadió el dirigente estatal quien refirió que el proceso que se enfrenta todavía le faltan semanas por concluir, donde ellos están haciendo lo que les corresponde, “bajo condiciones difíciles”.