Cortesía de Julio Astillero
Ciudad de México.- Esta madrugada fue asesinado en Puerto Vallarta el exgobernador de Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval. Pese a contar con 15 guardias asignados y autos blindados, fue ultimado en el baño de un bar.
El hecho se suma a una serie de atentados perpetrados en los últimos años en contra de miembros de la clase política jaliscienses, algunos de ellos contra funcionarios de la administración encabezada por el propio Aristóteles Sandoval.
Apenas unos días después de que Sandoval tomara posesión como gobernador de Jalisco, el 9 de marzo de 2013 fue asesinado el secretario de Turismo, el empresario José de Jesús Gallegos, mientras circulaba en su camioneta por las calles del municipio de Zapopan, en la Zona Metropolitana de Guadalajara.
En su momento, el entonces secretario de Gobierno del Estado, Arturo Zamora, señaló que el hecho estaba “relacionado con sus actividades económicas y empresariales previas a ser designado titular de Turismo” por lo que “nada tienen que ver los sucesos con el cargo que acaba de asumir”.
Gallegos era fundador y presidente de la empresa Jegal, Project Construction Management y era reconocido en el medio turístico por haber levantado un emporio hotelero casi de la nada, además de haber sido el creador del concepto Mayan Resort. En su momento, la Fiscalía Central de Jalisco mencionó que había un antecedente de agresión a balazos a una de las empresas de Gallegos, seis o siete años antes del atentado. En mayo de 2013, Luis Carlos Nájera, entonces Fiscal General del Estado, dio a conocer la detención de cuatro presuntos miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación, que dijeron haber participado en el asesinato como represalia porque Jesús Gallegos habría estado apoyando económicamente a un cártel rival.
En agosto de 2014, fue asesinado a balazos el panista Manuel Gómez Torres, alcalde del municipio de Ayutla, municipio de la zona serrana. El hecho ocurrió en su rancho particular. El subdirector de la policía municipal de dicha demarcación, Juan Ramón Ramírez, había sido tiroteado en junio del mismo año. También en agosto de 2014, fue ejecutado en Guadalajara el regidor de Cabo Corrientes -otro municipio costero-, Héctor Javier Salazar García, de Movimiento Ciudadano
En septiembre de 2014, Gabriel Gómez Michel, diputado federal priista por el distrito 18 de Jalisco, con cabecera en Autlán de Navarro, en la zona de la costa sur del estado, fue secuestrado y días después su cuerpo fue encontrado calcinado a bordo de su camioneta en el estado de Zacatecas. Gómez Michel, originario del municipio de El Grullo, quien también era médico, no tenía antecedentes de vinculación con ningún grupo criminal, ni había recibido amenazas. Un mes después de su asesinato, fueron detenidos cuatro miembros de un grupo criminal como presuntos responsables.
En diciembre de 2017, en distintos hechos, y con tres días de diferencia, fueron asesinados el líder de Movimiento Ciudadano en La Huerta, Salvador Magaña.
También el diputado local perredista Saúl Galindo, en el municipio de Tomatlán, ambas localidades de la zona costera del estado. Este último fue ejecutado frente a su hijo.
En abril de 2018, fue ejecutado el alcalde Juan Carlos Andrade Magaña, quien buscaba la reelección en Jilotlán de los Dolores por Movimiento Ciudadano. La localidad se encuentra en la zona sur del estado, limítrofe con Michoacán, con fuerte presencia de grupos delincuenciales.
En mayo de 2018, el ex fiscal y entonces secretario del Trabajo en el estado, Luis Carlos Nájera, sufrió un atentado del cual logró escapar, en la zona de Chapultepec, conocida por sus bares y restaurantes en el municipio de Guadalajara. Nájera sufrió heridas en un mano y otras cuatro personas también fueros heridas, incluyendo a un escolta del funcionario, quien fue titular de Seguridad Pública en el sexenio del panista Emilio González Márquez (2007-2013) y fiscal general con Aristóteles Sandoval, entre 2013 y 2015. Durante estos años, Nájera fue señalado en reiteradas ocasiones por otorgar protección a grupo criminales. Cinco hombres del Cártel Jalisco Nueva Generación fueron detenidos por el atentado en su contra y condenados en marzo de 2020 a más de siete años de prisión.
Durante la administración del priista Aristóteles Sandoval la violencia en contra de los funcionarios públicos fue una constante. Se contabilizó la muerte de más de 400 funcionarios de distintos niveles, de los cuales, al menos 132 fueron ultimados con armas de fuego. La zona de la costa fue particularmente violenta, debido a la presencia del Cártel Jalisco Nueva Generación y sus constantes disputas con cárteles rivales. La mayoría de los crímenes se mantienen impunes y la violencia no parece amainar en la administración actual, encabezada por el emecista Enrique Alfaro.