El Presidente ruso, Vladimir Putin, negó que Rusia pretenda influir en las próximas elecciones presidenciales francesas, al recibir hoy, de forma imprevista, a la candidata ultraderechista Marine Le Pen, de visita en Moscú.
“De ninguna manera queremos influir en los acontecimientos, pero nos reservamos el derecho de hablar con los representantes de todas las fuerzas políticas, como hacen también nuestros socios incluso en Europa y Estados Unidos.
“Rusia otorga gran importancia a sus relaciones con Francia, y tratamos de mantener relaciones iguales tanto con representantes del actual Gobierno como de la oposición”, añadió el líder del Kremlin.
La política francesa, que encabeza las encuestas en Francia para la primera vuelta electoral del 23 de abril, llegó esta mañana a Moscú, donde mantuvo un encuentro con miembros de la Duma (Cámara baja del Parlamento) y su Presidente.
Pero su reunión con el líder del Kremlin, a un mes de las elecciones al Elíseo, no estaba prevista en la agenda, se anunció a la víspera.
“Sería muy interesante intercambiar con usted puntos de vista acerca de cómo se desarrollan nuestras relaciones bilaterales, y sobre la situación que se vive en Europa. Sé que usted representa a un espectro de fuerzas políticas europeas que está creciendo bastante rápido”, afirmó Putin.
Por su parte, la líder del Frente Nacional dijo que Francia y Rusia mantienen profundos lazos culturales, económicos y estratégicos, y opinó que su reunión con el Presidente ruso es muy importante ante la amenaza terrorista mundial.
“Sería útil intercambiar información de inteligencia entre nuestros países”, dijo al referirse al terrorismo internacional y al reciente atentado de Londres.
Putin, por su parte, manifestó que todos viven en las mismas condiciones difíciles, se debe reconocer la realidad de ese peligro y unir fuerzas contra el terrorismo, esto mientras recordó el incidente de esta madrugada en Chechenia, cuando seis miembros de la Guardia Nacional de Rusia murieron al rechazar una incursión guerrillera.
Agencias