Por Héctor Tapia

Morelia, Michoacán.- El deslinde es tajante. Ana Lilia Guillén Quiroz, diputada federal por Morena, remarca que no pertenece ni forma parte del grupo que lidera Juan Pérez.

Le interesa que eso quede claro porque, asevera, no quiere que le liguen con quien promovió el voto cruzado en contra de candidatos de Morena, poniendo en riesgo el proyecto de la Cuarta Transformación.

En entrevista para Metapolítica explica que “hay compañeros que sí han hecho el señalamiento” de que se le liga a ella con Juan Pérez; sin embargo, remarca, “tengo meses que no me siento a platicar con él; es un personaje misógino, no padezco el síndrome de la mujer maltratada. A mí quien una vez me maltrata, si puedo le regreso el golpe y me retiro”, refiere.

Hizo este deslinde a partir de que luego de la integración del Equipo de Transición de Alfredo Ramírez, del cual ella forma parte, se le ligara políticamente con el ex líder magisterial y ex legislador Juan Pérez Medina, quien en su momento se apuntó por la candidatura al gobierno de Michoacán por Morena.

“Tengo meses que no me siento a platicar con él; es un personaje misógino, no padezco el síndrome de la mujer maltratada. A mí quien una vez me maltrata, si puedo le regreso el golpe y me retiro”.

Ante esa situación, Ana Lilia Guillén dijo que ella no tiene un referente masculino que la maneje políticamente en algún grupo; “desde hace 20 años dejé de ser alfil, y me he venido manejando de manear autónoma, y en este momento ni Juan Pérez ni ningún grupo puede decir que pertenezco” a ellos.

Dijo a su vez que si bien Juan Pérez tiene su grupo y lo respeta, “para mí sería imposible decir que soy del grupo de Juan después de la campaña del voto cruzado, del voto en blanco que impulsaron”.

“Que se me señale, de ninguna manera; no comulgo con ellos, ahora con mayor razón”, dijo, y tras la actitud que tuvo el ex dirigente magisterial, que le reclamó sobre la campaña contra algunos candidatos de Morena que emprendió, de pedir el voto diferenciado, el votar por otros partidos adversos a la cuarta transformación, es que le preocupa a la diputada federal que se le ligue con dicho actor político.

“Eso es algo que a mi no me interesa que al final se me relacione con eso; eso lo hicieron ellos como equipo político”, explicó y dijo que ella con Alfredo Ramírez han caminado juntos, y han trabajado en equipo, aunque lo hicieron también de forma autónoma uno del otro, pero alrededor del mismo proyecto.

“Llama mucho la atención que alguien quiera que se me ligue con Juan Pérez, que es antifeminista, que es grosero, y no voy a permitir ser maltratada por nadie”.

“Espero que en Morena hayan percibido tal cual actuó Juan Pérez y su equipo durante la campaña, donde decían con quién iban y con quién no, nunca compartí esa forma de hacer política”, explicó, e insistió en que ella no depende políticamente de nadie.

En contexto explicó que si bien no se estuvo de acuerdo “en cómo se negociaron las candidaturas” en Morena, cuando llegó Alfredo Ramírez a la misma, la estructura venía de estar “desmotivada a participar” y una vez la designación de su candidatura “teníamos que asumir que quienes estaban ahí” ya eran candidatos, en relación a otras postulaciones, “gustara o no”.

“Había personas con antecedentes poco recomendables” como candidatos, y como parte del proyecto se les iba a apoyar, fundamentalmente en diputaciones locales y federales, por el acompañamiento al proyecto de nación del presidente Andrés Manuel López Obrador.

“No podíamos dejar al presidente con los flancos descubiertos, y ese fue mi reclamo” con algunos grupos, como el de Juan Pérez, que hicieron campaña contra Morena.

“Me interesa cuidar mi figura, mi autonomía, nosotros entendimos por qué teníamos que hacer campaña por todos en Morena”, explicó la legisladora federal.

“No me gustaría que me reclamaran, o que pensaran que estuvimos en esa dinámica, aunque no fue el único grupo que incurrió en eso, en la simulación de muchos compañeros”, dijo Ana Lilia Guillén quien explicó que “en política me ha tocado vivir mucha violencia de genero como para permitirlo que se siga dando; es difícil ser mujer, ser honesta y ser política”.

En relación a la transición que se está por vivir en la administración estatal, Ana Lilia Guillén, quien forma parte de dicho equipo de transición por parte del gobierno electo, dijo que “me queda claro que el gobierno del estado está tratando de ganar tiempo solamente, y digo el gobierno del estado porque el más interesado que esto suceda es el gobernador, porque no hay elementos para tirar la elección”, es tiempo que buscan ganar para blindarse, aseveró ante la resistencia de reconocer los resultados por parte de Aureoles Conejo.

“Tu servidora ha recibido señalamientos donde hablan de la destrucción de papeles, saqueo de oficinas, pero eso no lo podemos comprobar, se quedan en comentarios, hasta que no tengamos elementos en las manos” es que se podrá hacer alguna denuncia formal, explicó.

“Es obvio que entramos a una fase de enrarecimiento político por parte del gobernador”, quien consideró está molesto por haber perdido las elecciones con Carlos Herrera Tello y “por la inversión tan grande que hicieron en esta elección, donde hubo lugares donde hasta 3 mil pesos pagaron por voto”, abundó la diputada federal.

La revisión puntual de la administración saliente y las cuentas que entregará “podría durar más, porque son varias cosas las que están sucediendo al interior de la administración estatal; pareciera que hay mucho interés en ocultar algunas cosas”, las cuales tendrán que salir a la luz pública en su momento.