Metapolítica
Ciudad de México.- Hoy, China volvió a suspender vuelos y trenes, canceló partidos de la liga profesional de basquetbol y anunció una campaña masiva de pruebas en Wuhan, debido a un brote creciente de la variante Delta que llegó a la ciudad donde se detectó la enfermedad originalmente en 2019.
Aunque la cantidad total de casos no llega a mil, el brote es aún más amplio que cualquiera que haya ocurrido en China luego de la epidemia que arrasó con Wuhan a principios de 2020.
Aunque China no ha eliminado el COVID-19, sí lo ha contenido en gran medida con cuarentenas y campañas masivas de pruebas para aislar a las personas infectadas, según surgen nuevos contagios.
La mayoría de los brotes anteriores no fueron más allá de una ciudad o provincia, pero ahora se confirmaron casos en más de 35 ciudades en 17 de las 33 provincias y regiones de China.
Aunque los brotes actuales todavía son unos cientos de casos, se han expandido mucho más que otros y han alcanzado varias provincias y ciudades, incluida Pekín, la capital. Muchos de ellos fueron identificados como la variante Delta del virus, que ya es común en muchos países.
La Comisión Nacional de Salud informó este martes de 90 casos nuevos el día anterior, 61 de contagios locales y 29 de personas llegadas hace poco del extranjero.
Científicos del gobierno afirmaron que las vacunas chinas son menos efectivas contra las nuevas variantes del coronavirus, pero ofrecen algo de protección. Por ahora, sólo se inocula con vacunas chinas. Las autoridades aseguran haber aplicado más de mil 600 millones de dosis.
Con información de El Financiero