Oscar Guerrero / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla dijo que no necesitará 160 escoltas para su seguridad, los cuales consideró excesivos para responder por la protección de un mandatario como sucedía con el exgobernador Silvano Aureoles Conejo.
En su primera entrevista colectiva como mandatario estatal, al preguntársele si reduciría la cantidad de elementos para su seguridad, Ramírez Bedolla respondió de manera ambigua.
“Había 160, no vamos necesitar nosotros esos 160”, declaró tajante en referencia a los elementos que resguardaban la seguridad de su antecesor en el Ejecutivo estatal.
La revisión de los escoltas asignados a la seguridad de quienes forman o formaron parte del Gobierno de Michoacán también sería una tarea pendiente, ya que Ramírez Bedolla precisó que actualmente 400 elementos responden por la seguridad de funcionarios y exfuncionarios.
“Hay cerca de 400 elementos de la Policía estatal que están en funciones de escoltas, y tenemos que hacer una revisión profunda en ese tema, para que realmente tengan resguardo las personas que los protocolos así los manejen, pero no en general por decisiones de ocurrencia o de beneficio a amigos o socios”, comentó.
Sin embargo, reconoció que “el Estado está obligado a proteger a personas en vulnerabilidad o que tienen, por sus desempeños, una función de seguridad pública”.
El gobernador no precisó cuántos elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) dejarán de cumplir funciones de escoltas, pero adelantó que la delegación de funciones no estará acompañada de “ocurrencias en beneficio de amigos o socios”.