Metapolítica
Morelia, Michoacán.- El presidente Andrés Manuel López Obrador, entre risas, que no tiene favoritos ni favoritas para sucederlo en la Presidencia, y dijo que Morena decidirá a su candidato por medio de encuestas, por lo que serán los ciudadanos quienes lo elijan.
—¿Se puede afirmar que Claudia (Sheinbaum) es su preferida para sucederlo? —le preguntaron la presidente.
—Pues está buena la pregunta —dijo entre risas el mandatario.
“Yo siempre he respetado la voluntad de la gente, los deseos de la gente. No he actuado de manera antidemocrática en toda mi vida pública, y me tocó fundar como otros, mujeres y hombres, Morena, y hubo dos cosas que nos ayudaron mucho a resolver conflictos: una, que se pueden hacer encuestas para elegir a los candidatos, eso está en los estatutos de Morena”, abundó el mandatario.
Lo anterior se propuso, dijo, “porque se tenía que cuidar las elecciones de candidatos para que no metieran la mano quienes estaban en contra del movimiento de transformación”.
“¿Me pides mi opinión? Te digo, no tengo ningún preferido, a ninguna preferida, hablando en términos de pluralidad y de género. ¿Quién lo va a decir en su momento? El ciudadano”, señaló.
Y agregó: “La gente está muy despierta, se hace una encuesta, dos, tres, y se ve quién es quién, y se resuelve el problema. Eso es el método que yo considero más conveniente (…) Se hace insaculación, pero se conoce más coloquialmente como sorteo, entonces el que se saca primer lugar es el que se queda. Eso es lo mejor”.
Al respecto, dijo que “los ‘profesionales’ de la política” dicen que “eso está mal porque ¿cómo un maestro albañil?, ¿cómo un comerciante?, ¿cómo una mujer indígena van a ser diputados si no tienen la preparación? Para ser diputado lo que se requiere es honestidad, representar al pueblo y tener vergüenza. ¿Para qué quiero un experto graduado en Harvard si va a venir a votar en contra de los intereses del pueblo?”.
López Obrador se dijo “muy contento porque hay relevo generacional”.
“Lo que dije, lo vuelvo a refrendar: hay relevo generacional. Sería lamentable que no hubiese gente con capacidad –mujeres, hombres; hay muchísimos– para continuar con la obra de transformación, y esto en su momento se va a decidir. A mí me faltan casi tres años”, aseveró.
