Metapolítica
Morelia, Michoacán.- El presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer que el avión presidencial adquirido al final del sexenio Felipe Calderón para disfrute de Enrique Peña Nieto, y que ha estado tratando de vender desde que inició el suyo, tiene dos posibles destinos: intercambiarlo por helicópteros para mitigar incendios forestales o entregarlo a la empresa que se encargará del nuevo aeropuerto de la Ciudad de México.
“No se ha podido vender el avión porque está hecho a la medida de los clientes de ese entonces. No es un avión estándar, sino que es un avión arreglado para viajes de personalidades, de ejecutivos, de gente muy influyente. Ese avión en situaciones normales puede trasladar hasta 240 pasajeros. Hay un avión con esas características o dos que tienen vuelos a Europa, pero este avión sólo tiene 80 espacios porque tiene oficina, tiene más amplitud para todo, tiene una recámara, tiene baño, entonces el volver a convertirlo ya se analizó y la empresa sostiene que sería muy difícil y costaría más, por eso ha llevado tiempo”, señaló el mandatario.
El mandatario reiteró que desde que inició su sexenio están “procurando que se venda”.
“Hay propuestas de empresas que quieren intercambiar unos helicópteros por el avión, incluso son helicópteros que podrían utilizarse para atender incendios forestales, y estamos analizando esa posibilidad, siempre y cuando el avión se acepte al precio de avalúo, igual los helicópteros”, mencionó López Obrador como una primera opción.
La segunda opción, dijo, “es que se entregue a la empresa que va a manejar el nuevo aeropuerto junto con el aeropuerto de Palenque, de Chetumal y el nuevo aeropuerto de Tulum y el Tren Maya, que esa empresa maneje este avión y pueda rentarlo. Hay que hacer cuentas para que se pueda tomar esta decisión. Esto sería para viajes de la Ciudad de México a Tulum, al nuevo aeropuerto, a Cancún, a Los Cabos”.
El presidente insistió que uno de los problemas del avión es que, para que pueda ser utilizado de manera adecuada, debe recorrer grandes distancias, “volar en promedio cuatro o cinco horas”.
“No es un avión que deba utilizarse… Ya lo hemos dicho aquí, por eso fue un absurdo por donde se le vea, esa compra, es una situación irracional, no sólo por el lujo, por la extravagancia, sino porque técnicamente, esos aviones están diseñados para ir a Europa en 10 horas sin recarga de combustible, para largas distancia”, dijo.
Pese a que no se usa, subrayó, “se cuida” y de vez cuando “se vuela conforme a las normas de mantenimiento. Los costos de mantener el avión son muchísimo menos que lo que gastaríamos si yo utilizara ese avión o cualquier funcionario”.