Gustavo R. Gallardo / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que “se cometió un acto de traición a México” por parte de los diputados que votaron por desechar la iniciativa de reforma eléctrica, y los comparó con grupos conservadores históricos que “siempre han apoyado a los intereses extranjeros”.
“Se cometió un acto de traición a México por parte de un grupo de legisladores que, en vez de defender los intereses del pueblo, de la nación, en vez de defender lo público se convirtieron en francos defensores de empresas extranjeras que se dedican a medrar, a robar, y estos diputados los respaldaron a los saqueadores, para decirlo con claridad”, dijo el mandatario.
En conferencia de prensa, López Obrador tildó de “muy lamentable” el rechazo a la reforma, aunque, dijo, “tampoco es extraño”.
“Así ha sucedido en otros tiempos de nuestra historia. Los conservadores siempre han ido al extranjero o siempre han apoyado a los intereses extranjeros, en contra del interés nacional”, enfatizó.
Entonces, el presidente comparó la votación de ayer en contra a la reforma eléctrica con el hecho de que un grupo de conservadores fueron a Estados Unidos a buscar a Antonio López de Santa Anna luego de que este entregara casi la mitad del territorio mexicano al gobierno de ese país.
“Después de que este tirano había provocado el que nos arrebataran más de la mitad de nuestro territorio, cuando el gran zarpazo, cuando nos invaden los estadounidenses, cuando izaron la bandera aquí en Palacio Nacional, después de eso, incluidos otros episodios de los polkos, conservadores traidores, después de esos lamentables hechos, todavía se atrevieron a ir a buscar al extranjero a Santa Anna para que regresara a cometer otras atrocidades, vender otra parte del territorio y convertirse en alteza serenísima y desatar la guerra contra el pueblo de México para imponerse. Esa es obra del conservadurismo”, relató.
Y agregó: “Lo de ayer, sin exagerar, tiene que ver con ese pensamiento conservador que predomina. Ellos prefieren estar bien con los potentados”.
Destacó que hubo diputados que votaron “a favor de México, en favor de los intereses de México. Que no digan los vendepatrias que la reforma afectaba, ¡no argumentaron nada en contra!”.
López Obrador se refirió particularmente al diputado Idelfonso Guajardo, exsecretario de Economía durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, quien dijo que de aprobarse la reforma eléctrica “nos iba a ir muy mal con los extranjeros, que nos iban a castigar porque nos iban a llevar a tribunales internacionales, porque estábamos incumpliendo con el Tratado (entre México, Estados Unidos y Canadá), cosa que es absolutamente falsa”.
“Pero claro, ese señor piensa así porque cuando se estaba negociando el Tratado, ese señor, junto con el anterior secretario de Hacienda o mandamás, (Luis) Videgaray, ya habían entregado el petróleo, todo un capítulo del Tratado para que el petróleo de México se sometiera al interés de Estados Unidos y de Canadá, un capítulo que nosotros hicimos a un lado”, añadió.
“Esa es la mentalidad que prevaleció ayer”, reiteró.
“Si hubiéramos comprado los votos como ellos en 2013, pasaba la reforma”
El presidente dijo que “ya veíamos venir esto”, y señaló que se pudo evitar el rechazo a la reforma eléctrica “si (hubiéramos) actuado como (ellos) lo hicieron en 2013, que compraron los votos, pero no somos iguales”.
El mandatario destacó que llevaba mucho tiempo que una iniciativa del Presidente de la República “se rechazara así, de ese nivel”, pero además, que no hubiese, “de parte del gobierno, intención de comprar a nadie, también es histórico”, y afirmó: “Y dicen que no hay democracia, y los hechos son las pruebas, lo que estamos viviendo”.
“En el 2013 obtuvieron mayoría absoluta; no hubo oposición porque repartieron dinero, por eso fue la llamada reforma energética, que es la reforma que nosotros estamos enfrentando”, dijo, y advirtió: “Esto no termina todavía; esto apenas comienza”.
