Gustavo R. Gallardo / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- El presidente Andrés Manuel López Obrador se refirió a las tres obras emblemáticas de su gobierno: AIFA, refinería Olmeca y Tren Maya, en torno a las críticas recibidas de parte de la oposición y sus intenciones de detenerlas, y aceptó que sólo la del tren está siendo retrasada.
En conferencia de prensa matutina, el mandatario dijo que sus adversarios políticos, “que se enojan mucho”, critican que el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles no tiene vuelos. “Sí, pero ya lo tenemos ahí, ya está construido y sí se usa, y cada vez se va a usar más”, explicó.
—¿Ya lo estrenó, presidente? —preguntó una reportera.
—No todavía, pero cuando yo pueda, es que no voy a hacer un show, no hay necesidad… Todo a su tiempo —respondió.
“Ayer hablaba yo de cómo hay un daño estructural en la terminal 2 [del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México] porque no hicieron bien la obra y tenemos que apuntalarla, y si se necesitara, por ejemplo, cerrar una parte, tenemos ya el aeropuerto alterno. Si no lo hubiésemos construido en tan poco tiempo, imagínense en qué situación estaríamos”, dijo.
Y se refirió entonces a la refinería Olmeca: “Ya está construida. ‘Ah, pero todavía no produce gasolina’… Ya va a producir. Lo importante es que ya la tenemos. Ya quisieran otros países contar con una refinería así, aún no integrada y aún no produciendo. ¡Brincos dieran de alegría!”.
López Obrador dijo que la obra en la que “vamos a tener menos posibilidad de operación” es la del Tren Maya, “porque tendríamos menos tiempo para la operación”, por eso “Claudio [X. González] y todos estos que no nos quieren, quieren retrasar” más la construcción.
“Con el aeropuerto tenemos dos años por delante. La refinería, dos años… pero el tren estamos pensando inaugurarlo en diciembre del año próximo, me van a faltar siete meses para terminar [mi gobierno]. Ya tenemos el tiempo medido, entonces por eso la desesperación de frenarnos. Son traviesos, nada más que no pueden porque no actúan de buena fe”, dijo.
Y remató: “La verdad, qué ganas tienen de parar el tren y van a terminar subiéndose al tren”.
