“La confianza actualmente en los órganos electorales es del 74.70%, una cifra que incluso, demuestra que se tiene más confianza en las personas que organizan las elecciones, que en el presidente de la República”.
Desde hace más de tres años nos ha quedado claro algo: sólo el Presidente López puede decidir qué está bien y qué no, sólo él. La prueba está en lo declarado en torno a la propuesta de reforma electoral que pretende implementar, lo cual no debe pasar para desapercibido en la sociedad.
Tenemos que dejar muy claro lo siguiente: la revocación de mandato es un ejercicio que pone en marcha el más grande mecanismo de participación ciudadana que se ha visto en México, por lo cual, la ejecución del mismo, incluyendo la difusión, corresponde al Instituto Nacional Electoral, no a los funcionarios emanados del partido en el gobierno.
En el mar la vida es más sabrosa, eso se dice, bueno, siempre y cuando la marea no esté alta. En ese sentido, hablemos que el ambiente electoral es un mar tranquilo, hasta que comienzan a aparecer los estirones en torno a las elecciones, sus actores y componentes.
Por Oscar Carbajal
Dentro de la sociedad siempre
hemos escuchado que existen reglas no escritas y por supuesto que esto no es
ajeno de la política, esa...