Héctor Tapia
Ante los tiempos de la discusión de una reforma en materia político electoral, de persistirse en la intención de desaparecer o mermar a los organismos públicos locales electorales, y con esto se estaría poniendo en graves riesgos a la democracia local no sólo a la federal, consideró el magistrado electoral del Tribunal electoral del Estado de Michoacán, Salvador Alejandro Pérez Contreras.
En entrevista explicó que cualquier reforma en materia política se tiene que dar 90 días antes de que inicie el proceso electoral, que está programado para septiembre, es decir, se tiene que tener una reforma político electoral para finales de mayo próximo.
En este contexto, dijo, una reforma “de gran calado” al sistema político electoral resultaría complicado.
Explicó que en la agenda del Congreso de la Unión se tienen contemplados de entre algunos puntos de una posible reforma electoral un aspecto “delicado”, que es la desaparición de los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLES), y esto “permearía en afectar a los tribunales electorales locales”, por lo que es un aspecto que no se debe dejar de observar.
Dijo también que no sería conveniente que se de una reforma político electoral exprés, sin el consenso de los actores políticos e instituciones electorales, “nos puede poner en grandes riesgos, tanto a la democracia local, no sólo a lo federal”.
Destacó que desde 1988, en que comenzó la lucha por democratizar las instituciones, fue que se comenzaron a crear estos organismos electorales y a fortalecerlos, y desde entonces se ha ido construyendo un andamiaje, una base constitucional, para crear instituciones que generan certeza.
“Ha sido un trabajo que se ha venido haciendo a lo largo de tres décadas para brindar certeza, objetividad, imparcialidad, de quienes participamos en los escenarios de lo que corresponde el proceso electoral para legitimar el poder público”, explicó el magistrado Salvado Alejandro Pérez.
Entre las reformas de carácter federal están por un lado, y por otro están las que se hagan de carácter estatal o local, las cuales no deben contraponerse porque “después tendríamos un conflicto que tendrá que ser superado” a través de acuerdos, como se dio en el 2014.
Destacó que “la elección del 2018 fue histórica, la del 2021 será más compleja, porque además de que se renovará el Congreso de la Unión, vienen las elecciones a gobernadores, en todos los estados, ya sea para congresos locales y ayuntamientos, y se vuelve más compleja la elección”.
