Redacción
Morelia, Michoacán.- La pandemia de COVID-19 ha sido desastrosa para el mercado laboral mexicano. Las mermas más severas en ese aspecto las padecen los estados con mayor desarrollo económico, aunque también se puede observar una pérdida de trabajos generalizada en el país.
Es la conclusión que exhibe Heliodoro Gil Corona, economista y Coordinador de Proyectos Estratégicos del Colegio de Economistas del Estado de Michoacán.
“En México, el descenso de la ocupación formal en el mes de mayo experimentó freno en relación a la pérdida del mes de abril, al disminuir la caída en -38.0%. Las plazas de trabajo pasaron de -555 mil 247 a -348 mil 526 entre los años 2019 y 2020”, grafica el economista en su estudio Pulverizado el Empleo Formal en México: análisis en el Periodo Enero-Mayo y Expectativas 2020.
Gil Corona asegura que el coronavirus contagió al mercado laboral mexicano “produciendo en los meses de marzo, abril y mayo una pérdida de un millón 030 mil 366 empleos formales, cifra sin precedentes en las estadísticas oficiales en el país”.
Añade que en el recuento nacional es evidente el achicamiento del mercado laboral, ya que la masa de trabajadores formales dados de alta al IMSS se redujo de 20 millones 421 mil 442 en diciembre de 2019 a 19 millones 583 mil 170 en mayo de 2020, nivel equivalente al que se reportaba en enero de 2018.
“El resultado en el periodo enero-mayo se suma a los registros inéditos en la historia laboral del país. El empleo formal sufrió una disminución abrupta de -376.2, al caer los puestos de trabajo de 303 mil 545 a -838 mil 272 entre 2019 y 2020”.
Las crecientes pérdidas de trabajos formales, indicó, se registraron en las denominadas economías más robustas de México. “Lo podemos constatar en las entidades federativas como la Ciudad de México con -197 mil 321; Quintana Roo con -104 mil 921; Nuevo León con -63 mil 155; Estado de México con -45 mil 993; Guanajuato con -36 mil 842; Jalisco, con -42 mil 375; y Querétaro con -42 mil 375”.
El caso michoacano
Gil Corona afirma que Michoacán no estuvo exento de esta compleja recesión que enfrenta la economía mexicana.
“El deterioro social se acumula de manera preocupante: se precariza el mercado laboral, se cancelan las oportunidades de trabajo, la carencia de ingresos se agudiza y la pobreza repuntará”.
En el mes de mayo del presente año el empleo formal profundizó su caída en 363.3%, al incrementar la pérdida de plazas de -2 mil 217 a -10 mil 271 entre 2019 a 2020. Se trata de “una caída nunca vista para un mes de mayo de acuerdo a los reportes oficiales de la STPS”.
Asimismo, durante el periodo enero-mayo del año 2020 la ocupación formal en Michoacán colapsó en -448.5%, al reducirse el monto de puestos de trabajo de 2 mil 836 a -9 mil 884 de 2019 a 2020.
“Los componentes por temporalidad se contrajeron drásticamente, tanto el permanentes, el eventual urbano como el eventual del campo. Este panorama económico complejo contribuye a precarizar el mercado de trabajo estatal, cuyos factores de explicación son múltiples: la parálisis de las actividades productivas ocasionada por el coronavirus, la contracción que observa la economía estatal, la ausencia de inversión pública y privada, y la crisis financiera sistémica que padece el gobierno de Michoacán”.
Finalmente, el expero indicó que la instutución que encabeza estima que “la ocupación formal en México en 2020 descenderá en -391.1%, al caer las fuentes de trabajo de 342 mil 077 a -995 mil 00 de 2019 a 2020”.
Y en el caso de Michoacán, el CEEM prevé una caída del empleo formal de -345.5%, al reducirse las plazas formales anuales de 12 mil 340 a -30 mil 290 de 2019 a 2020.