Metapolítica
Morelia, Michoacán.- “Emilio Lozoya Thalmann, secretario de Energía y director del ISSSTE durante el gobierno de Carlos Salinas, operó de manera personal en México, las negociaciones con la Fiscalía General de la República (FGR) para que su hijo Emilio Lozoya Austin, ex director de Petróleos Mexicanos (Pemex), aceptara la extradición”.
Así inicia la nota publicada este domingo por el diario la Jornada, y ya replicada por muchos medios nacionales ante la relevancia de los nombres implicados.
Según la información, firmada por el reportero Gustavo Castillo García, desde la segunda quincena de diciembre los representantes de Lozoya Austin, principalmente su padre, y personas cercanas al abogado Javier Coello Trejo, entablaron el diálogo y fueron ofreciendo información al Ministerio Público a condición de que se otorgaran beneficios al ex director de Pemex.
“Los entrevistados –quienes solicitaron el anónimato por ser cercanos a la agenda de los encargados de las áreas jurídica, de ingreso y vigilancia de la FGR– refirieron que los encuentros se efectuaron en la institución ministerial, en Insurgentes Centro 20, en la Ciudad de México”.
En las reuniones habrían participado funcionarios de primer nivel de la FGR, entre ellos el titular de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delitos Federales (SEIDF), Juan Ramos López, y el encargado del área que dirigió la conclusión de la investigación del caso Odebrecht y la denuncia presentada por la compra de Agronitrogenados.
Y reporta que los ejecutivos a cargo de Odebrecht intentaron comprar la libertad de algunos involucrados, entre ellos Lozoya.
“Sobre el caso Odebrecht, durante la gestión de Alberto Elías Beltrán entonces Procurador General de la República— la entonces PGR se negó a llegar a un acuerdo reparatorio con la constructora brasileña.
“Odebrecht ofreció pagar otros 10.5 millones de dólares como reparación del daño al Estado mexicano, y a cambio no se sancionara a nadie por los casos corrupción, incluyendo a Lozoya”.
Agrega que Luego del cambio de administración federal y la llegada de Gertz, la posición fue no aceptar acuerdos reparatorios sino sancionar a los implicados, “aunque entre ellos no estarían los representantes de Odebrecht por así establecerlo los convenios firmados con el gobierno brasileño para obtener las declaraciones de los integrantes de la constructora sudamericana”.
En este momento Emilio Lozoya permanece detenido y custodiado en el hospital Ángeles del Pedregal por anemia, debilidad corporal y problemas en el esófago.
