América Juárez Navarro
Morelia, Mich., Los usos y costumbres en las comunidades indígenas son un impedimento para que las mujeres accedan a la justicia en casos de violencia intrafamiliar, denunció Evelyn Hernández Pasaye, asesora jurídica del Ayuntamiento de Paracho, al admitir que incluso los jefes de Tenencia impiden en muchas ocasiones hacer efectivas orden de restricción para los agresores, porque consideran no se tomó en cuenta su parecer.
“En el caso de Paracho generalmente se comunican con el Jefe de tenencia, dependiendo de su consentimiento si se apoya y lo hacemos, porque si hay una orden de restricción o puede trasladarse, tiene que ser la policía de la comunidad o los elementos de seguridad, porque si se hace directo de una autoridad de justicia, no se permite entrar a la comunidad, son cerradas. Muchas ocasiones las mujeres regresan con el agresor”, indicó.
Al recordar algunos episodios sobre cómo se obstaculiza la acción de la justicia, recordó un episodio de violencia que llegó a la Fiscalía Regional de Uruapan, ahí se le impidió el paso a la comunidad a la policía para llevar una notificación sobre una denuncia, lo que obligó a la mujer a regresar con su agresor.
En entrevista, detalló que la violencia económica y sicológica, es un común denominador en las localidades indígenas, misma que no solo es ejercida por las suegras, pues es común que ellas se encarguen de vigilar a las mujeres, y en persuadirlas para que no abandonen a sus parejas cuando sufren violencia.
“Por parte de la suegra también hay una violencia, aunque la predominancia son que las suegras están sujetas a la potestad o dominio y el control sobre las nueras es diferente, hay algunas mujeres que tienen apertura y con la denuncia acuden, pero no hay acompañamiento”, expresó.
Estimó que existen en Paracho al menos cien casos de violencia de género que no se han denunciado, a esto se suma que además de la suegra los familiares de las parejas entran en el círculo de la de violencia física donde se usan machetes o hachas, los cuáles sirven para agredir e intimidar a las mujeres o su familia, y en algunos casos las retienen a la fuerza en los domicilios del cónyuge.
Usos y Costumbres principal obstáculo para acceder a la justicia en casos de violencia de género
