Héctor Tapia
Jesús Reyna García valora renunciar al Partido Revolucionario Institucional (PRI), y en próximos días tomaría definiciones al respecto, lo mismo que otros militantes que decidan hacerlo.
Esto frente a lo que se considera como actitud dictatorial por parte de los integrantes de la expresión que se identifican con este liderazgo político.
Lo inmediato es que tomaron la determinación de no participar ni respaldar las decisiones del partido tanto a nivel nacional como estatal, por no cumplir los acuerdos establecidos en la mesa, acusaron en rueda de prensa ofrecida la tarde de este miércoles.
En lo que respecta a Jesús Reyna García, el ex gobernador interino de Michoacán, en entrevista dijo que las renuncias son de carácter personal, y que cada quien tomará su decisión.
“No son decisiones personales mías, somos un grupo de amigos que dialogamos, concertamos y tomamos decisiones”, refirió en cuanto a la determinación que tomaron como grupo político, y descartó que la postura sea producto de un “berrinche”.
“Lo hacemos con la mayor decencia política y cortesía, y lo que suceda con el PRI ya no es cuestión nuestra”, remarcó Reyna García, quien dijo que se reconoce en el partido un instituto importante pero que las dirigencias no corresponden.
“Hubo falta de cumplimiento de compromisos, de respetar a la militancia y no se le ha respetado”, enfatizó.
De manera preliminar Cuauhtémoc Ramírez Romero, representante legal de la llamada planilla roja que buscó participar por el Consejo Estatal, a nombre de quienes integran la expresión política, dio a conocer el nacimiento de la organización Crisol Michoacano, figura bajo la cual seguirán participando en la vida política del estado, pero desmarcándose de manera tajante del partido, ante lo que calificó como falta de sensibilidad que tuvo el partido, tanto a nivel nacional como local, en el proceso interno para definir al Consejo Estatal.
“Participamos apoyando a Alejandro Moreno (para la dirigencia nacional), se hicieron acuerdos básicos de que sería la militancia la definición de dirigencia y candidatos, y se comprometió”, sin embargo no se cumplieron.
Además, dijo, ha habido designaciones por la dirigencia nacional las cuales “reflejan una actitud dictatorial”, que han estado, aseveró, “impregnadas de arrogancia”.
Cuauhtémoc Ramírez dijo que “las condiciones para el PRI en Michoacán son complejas por la alta competitividad de otras fuerzas, aquí el PRI ha apostado a la división” y apostó también al grupo político que en el 2015 llevó a perder al partido.
Por ello es que argumentó que se decidió como grupo “no participar más con el PRI”.
Indicó que será hasta los próximos días en que se verá si hay renuncias al partido, y que será determinación de cada actor; adelantó, en este sentido, que tendrán acercamientos con Rocío Luquín Valdés, secretaria general del partido en Michoacán, y que forma parte de la expresión, para conocer su postura también al respecto.
Cuauhtémoc Ramírez aseveró que la expresión de la cual forman parte es la “más importante” del partido, y destacó la presencia que se tiene en el territorio michoacano; “no vamos a dejar la actividad política y estableceremos alianzas con quien sea necesario”.
