Metapolítica
Ciudad de México.- Hasta el momento, las muertes por las inundaciones en el oeste de Europa superaban las 150 personas este sábado, mientras que los rescatistas realizan labores de limpieza para evitar más daños.
La policía dio a conocer que más de 90 personas murieron en Ahrweiler, en el oeste de Alemania, una de las más afectadas, y se cree que puede haber más fallecidos.
Anoche, las autoridades informaron de 63 decesos en todo el estado de Renania-Palatinado, donde se ubica Ahrweiler.
Otras 43 personas fueron declaradas muertas en el estado de Renania del Norte-Westfalia, el más poblado del país.
Asimismo, el centro nacional de crisis de Bélgica confirmó 24 decesos y añadió que es posible que la cifra aumente.
Las aguas cedieron este día en gran parte de las regiones afectadas, mostrando los daños.
El presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, tenía previsto viajar hoy a Erftstadt, al suroeste de Colonia, donde ayer se realizó un operativo de rescate para sacar a la gente que quedó atrapada cuando el piso cayó. Al menos tres viviendas y parte de una mansión cayeron en Blessem, distrito turístico de la localidad.
El ejército alemán usó vehículos blindados hoy para retirar los autos y camiones arrastrados por las corrientes en una carretera cercana, algunos de los cuales seguían sumergidos. Las autoridades temían que no hubiera personas que lograron escapar, pero no se han confirmado más víctimas.
Muchas zonas siguen sin electricidad ni servicio telefónico, algo que podría explicar el elevado número de desaparecidos comunicado por las autoridades inmediatamente de las inundaciones del miércoles y el jueves.
Unas 700 personas fueron evacuadas de Wassenberg, en la frontera con Holanda, tras romperse un dique en el río Rur.
Con información de Excélsior