Metapolítica
Moscú, Rusia.- Las mutaciones en el coronavirus ocurren mucho más lentamente que las mutaciones del virus de la gripe a pesar de la aparición regular de nuevas cepas, dijo a TASS el fundador y director general del centro de investigación DNKOM para estudios moleculares y genéticos, Andrei Isaev.
“Afortunadamente, el coronavirus muta mucho más lento que la gripe”, dijo.
Al mismo tiempo, según el experto, es simplemente imposible detener las mutaciones del coronavirus.
“Nunca hemos logrado ralentizar la evolución que nos rodea, por lo que es anticientífico hablar sobre las posibilidades de detener la mutación COVID. Por eso mutará siempre.
“Sin embargo”, agregó, “a diferencia de otros tipos de virus, sus mutaciones ocurren con bastante lentitud. Surgen nuevas cepas constantemente, pero durante un año y medio tres argininas cambiaron en el dominio de unión al receptor del coronavirus (el dominio RBD) y en mi opinión, es ridículo llamar a eso una mutación”.
Los biólogos rusos descifraron los genomas de más de 500 muestras de SARS-CoV-2 y rastrearon la propagación de nuevas variantes. Las observaciones confirmaron que la cepa delta del coronavirus comenzó a dominar en Rusia en junio el 2021, escribieron los investigadores en un artículo en la biblioteca electrónica bioRxiv.
La versión rusa coincide con lo que en noviembre del 2020 afirmó la doctora responsable de enfermedades emergentes y zoonosis de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Maria Van Kerkhove.
“Estamos viendo que el virus es relativamente estable, si bien es importante analizar las secuencias del genoma del coronavirus en distintos países para ver qué cambios son importantes”, dijo en una rueda de prensa.
Con información de Agencia Tass