Metapolítica
Morelia, Michoacan.- La variante Delta está demostrando ser tan infecciosa para los niños como para todos los demás, y los casos pediátricos aumentan en algunas partes de los Estados Unidos, dicen los pediatras y los hospitales infantiles.
Sin embargo, aún no está claro si la variante es más severa para los niños en comparación con las cepas anteriores de COVID-19, lo que lleva a más hospitalizaciones y roces con la muerte en lugar de solo resfriados.
Los casos infantiles de COVID-19 aumentaron constantemente a lo largo de julio, ya que Delta se convirtió en la cepa dominante en los Estados Unidos, según los datos de seguimiento mantenidos por la Asociación de Hospitales de Niños y la Academia Estadounidense de Pediatría.
Se informaron más de 71 mil 700 casos de COVID-19 en personas menores de 18 años entre el 22 y el 29 de julio, y los niños y adolescentes representan aproximadamente uno de cada cinco casos nuevos esa semana, según muestran los datos.
Los médicos y enfermeras del Johns Hopkins All Children’s Hospital en St. Petersburg, Florida, un estado golpeado por el aumento repentino del Delta, “han estado extremadamente ocupados atendiendo a pacientes pediátricos diagnosticados con COVID-19 en las últimas semanas, ya que visto uno de los mayores aumentos de casos en nuestro hospital desde el comienzo de la pandemia”, dijo Angela Green, vicepresidenta del hospital y directora de calidad y seguridad del paciente.
Pero hay informes mixtos sobre la gravedad de la enfermedad relacionada con la variante Delta en los niños.
Los números de seguimiento muestran que la tasa de hospitalizaciones pediátricas por COVID-19 es aproximadamente la misma que ha sido para las variantes anteriores, variando entre 0.1% y 1.9% según el estado.
Con información de UPI
