Metapolítica
Morelia, Michoacán.- Bomberos y residentes lucharon hasta la noche del lunes por séptimo día contra un incendio masivo en la segunda isla más grande de Grecia mientras la nación soportaba lo que el primer ministro describió como “un desastre natural de proporciones sin precedentes”.
El humo y las cenizas de Evia, una isla escarpada de bosques y calas cerca del continente griego, bloquearon el sol y tornaron el cielo anaranjado.
El incendio, que comenzó el 3 de agosto, es el más severo de cientos en la última semana en Grecia, devorando bosques de pinos vírgenes, así como hogares y negocios, y obligando a cientos a evacuar rápidamente por mar para salvar sus vidas.
Grecia ha sufrido su peor ola de calor en tres décadas, que elevó las temperaturas a 45 grados Celsius y convirtió sus preciados bosques de pinos en polvorines secos.
En un discurso televisado a nivel nacional, el primer ministro Kyriakos Mitsotakis dijo que la destrucción en Evia y en otros lugares “ennegrece los corazones de todos” y prometió una compensación para todos los afectados, y un enorme esfuerzo de reforestación y regeneración.
También se disculpó por “cualquier debilidad” mostrada al abordar la emergencia, un guiño a las críticas de algunos residentes y funcionarios que dijeron que los esfuerzos y el equipo de extinción de incendios de Grecia eran lamentablemente inadecuados.
“Estos últimos días han sido de los más difíciles para nuestro país en décadas”, dijo Mitsotakis. “Nos enfrentamos a un desastre natural de dimensiones sin precedentes”.
Con las carreteras de la isla cortadas por las llamas, los residentes y turistas huyeron a las playas y muelles de Evia para ser transportados a un lugar seguro por una flotilla de transbordadores y barcos.
Mientras tanto, las imágenes son elocuentes.
Con información de AP
