Oscar Guerrero / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- A juicio del expresidente Felipe Calderón Hinojosa, la crisis de seguridad que se vive en Michoacán debe resolverse mediante un enfrentamiento frontal contra la delincuencia organizada y no a través de la política de “abrazos y no balazos” impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Entrevistado durante el arranque de la Feria de la Catrina, en Capula, el exmandatario federal consideró que el gobierno federal tendría que atacar a los grupos criminales que operan en Michoacán y otros estados de la República, a fin de garantizar el blindaje de la ciudadanía.
“A la delincuencia no se le puede dejar entrar, a la delincuencia hay que enfrentarla y no por otra cosa, sino porque está en juego la seguridad de los ciudadanos y la obligación del Estado es defender a los ciudadanos, con la fuerza que el Estado le ha dotado, con la ley desde luego, pero con la fuerza del Estado”, declaró en entrevista.
Agregó que “si uno deja que la delincuencia avance, pues es como un cáncer que se apodera totalmente del estado, y cuando eso ocurre se extorsiona a los ciudadanos y florece el crimen”.
Calderón Hinojosa remarcó que la “fallida estrategia” de seguridad impulsada por el presidente Andrés Manuel López Obrador sólo habría derivado en un crecimiento exponencial de los homicidios registrados en el país, crecimiento que, subrayó, ha triplicado el número de ejecuciones contabilizadas durante su sexenio.
A propósito de la estrategia propuesta por el expresidente Felipe Calderón, es importante señalar que derivado de la “guerra contra el narco” que inició el exmandatario federal, su sexenio reportó 100 mil homicidios y 22 mil desaparecidos, teniendo como punto álgido de esa “guerra” el atentado contra civiles la noche del 15 de septiembre de 2008 en Morelia, Michoacán, en el que murieron ocho personas y más de 100 resultaron lesionadas cuando unos sujetos arrojaron granadas de fragmentación a una multitud que daba el grito de independencia en una plaza pública y en una calle cercana.
Pese a ello, fue incisivo en decir que la crisis de seguridad que enfrenta Michoacán sólo podría atacarse mediante un enfrentamiento frontal contra los grupos delincuenciales que operan a lo largo y ancho de la entidad.