Metapolítica
Ciudad de México.- La administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, pidió autorización a la Corte Suprema para dar por finalizado el programa Quédate en México, el cual obliga a miles de personas a esperar en la frontera mexicana por sus solicitudes de asilo.
Biden dijo al mayor tribunal estadounidense que de continuar la iniciativa, se obligaría “a mantener negociaciones con México para seguir con un controvertido programa que el gobierno ya ha declarado dos veces que no representa sus intereses”.
El programa —su nombre oficial es Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, por sus siglas en inglés)— no es la mejor herramienta para “disuadir la migración”, dijo el mandatario a la corte.
“El programa expone a los migrantes a riesgos inaceptables”, declaró.
En torno a los esfuerzos que realiza Estados Unidos por hallar soluciones regionales, el programa afecta las negociaciones con otros países.
“El MPP resta valor a los esfuerzos de relaciones exteriores del presidente para gestionar la migración regional”, comentó.
Y agregó: “En resumen, los tribunales inferiores han ordenado al Departamento de Seguridad que implemente y haga cumplir a perpetuidad el controvertido y efímero programa MPP, y lo han hecho a pesar de las determinaciones del presidente”.
El programa, iniciado por el gobierno del expresidente Donald Trump en enero de 2019, fue aceptado por México por razones humanitarias.
A la llegada de Biden a la Casa Blanca el 20 de enero de 2021, suspendió el MPP ese mismo día; en junio, el secretario de Seguridad, Alejandro Mayorkas, hizo oficial la cancelación.
En Missouri demandaron al gobierno federal bajo el argumento de no haber avisado a todas las partes involucradas antes de cancelar el programa. La demanda llegó hasta la Corte Suprema, la cual ordenó reactivarlo hace unas semanas.
El gobierno de Biden fue apoyado por el de México para restaurar MPP, pero apenas lo reiniciaron, ya enfrenta acusaciones de violaciones a los derechos humanos por parte de migrantes vulnerables.
Organizaciones civiles critican el programa por el riesgo en el que se encuentran los solicitantes de asilo.
Con información de Excélsior