Héctor Tapia / Metapolítica
La visita del secretario de gobernación federal, Adán Augusto López Hernández, fue de lo informativo a la rispidez por varias “eventualidades”, que se dieron durante el evento realizado en la capital michoacana.
Este encuentro, que estuvo encabezado por el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, sirvió como Segundo Encuentro del Plan de Apoyo para Michoacán por parte del gobierno de la República.
Del gobierno de la república no sólo acudió el encargado de la política interna del gobierno federal, sino también acudió Ricardo Mejía Berdeja, quien es el subsecretario de Seguridad Pública.
La temática del encuentro se centró fundamentalmente en el tema de seguridad, esto a partir de la ola de violencia que se ha registrado en el estado y que en fechas recientes ha recrudecido, lo que ha colocado a Michoacán ya en el primer lugar de homicidios dolosos del país.
Este Segundo Encuentro del Plan de Apoyo para Michoacán es en seguimiento a la mesa que estableció el propio presidente Andrés Manuel López Obrador con el gobierno de Michoacán, a los primeros días de que asumió constitucionalmente Alfredo Ramírez Bedolla como gobernador, con la finalidad de hacerle frente a la situación complicada en la que se le había heredado el estado, tanto en materia de seguridad, como financiera.
Otros de los aspectos que se abordaron en esta mesa de continuidad con los representantes federales fue el de la infraestructura, y la federalización de la nómina educativa; así como también esbozar algunos avances en cuando a diversas investigaciones relacionadas con hechos violentos que se han registrado en el estado en fechas recientes.
La rispidez se vivió en primer momento cuando representantes e integrantes de la comunidad de Arantepakua abandonaron el recinto del Centro de Convenciones, donde se realizó el evento, tras acusar que no compartirían el espacio con quienes consideran el responsable del asesinato de integrantes de su comunidad, registrado el 5 de abril del 2017, que fue el entonces secretario de gobierno Adrián López Solís, ahora Fiscal General del Estado.
El segundo momento ríspido fue cuando el senador Antonio García Conejo, medio hermano del ex gobernador Silvano Aureoles Conejo, tomó la palabra, y al hacerlo, tras solicitarlo, porque no estaba contemplado, fue abucheado, y recibió señalamientos de que la situación del estado actual fue producto del gobierno que encabezó su medio hermano.
Al encuentro estuvieron convocados también alcaldes, diputados locales y federales, senadores de la república por Michoacán, emanados todos de las distintas fuerzas políticas, representantes de cámaras empresariales, integrantes de organizaciones religiosas, representantes de comunidades indígenas, así como también representantes de medios de comunicación.
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