Gustavo R. Gallardo / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- El presidente Andrés Manuel López Obrador, luego de titubear en un primer momento sobre su asistencia a la Cumbre de las Américas si se excluye a países como Cuba, Nicaragua y Venezuela, volvió a ser cuestionado al respecto y esta vez fue claro: “Si se excluye, si no se invita a todos, va a ir una representación del Gobierno de México, pero no iría yo”.
En conferencia de prensa, el mandatario dijo que en su lugar asistiría el canciller Marcelo Ebrard.
Cuestionado sobre si este mensaje es una protesta, respondió que sí, “porque no quiero que continúe la misma política en América y quiero, en los hechos, hacer valer la independencia, la soberanía y manifestarme por la fraternidad universal”.
“No estamos para confrontación”, reiteró, sino “para hermanarnos, para unirnos, y aunque tengamos diferencias, las podemos resolver, cuando menos escuchándonos, dialogando, pero no excluyendo a nadie, además, nadie tiene el derecho de excluir, que nadie excluya a nadie”.
El mandatario negó que esta decisión pudiera tener un impacto negativo en la relación bilateral con Estados Unidos, porque ambos “son países independientes y tenemos una relación de amistad y de respeto”.
—Pero que Biden lo pudiera tomar a mal —se le comentó.
—No creo… no creo.
“Estoy hablando de que él habla de un pie de igualdad y él ha sido siempre respetuoso, pero además todavía falta para la Cumbre y podemos llegar a un acuerdo, pero sí tenemos que unirnos todos, buscar la unidad de América”, enfatizó.