Héctor Tapia / Metapolítica
Morelia, Michoacán.- A poco más de tres semanas de entregar la presidencia del Tribunal de Justicia Administrativa del Estado, el todavía magistrado presidente del organismo, Jesús Sierra Arias, fue enumerando una serie de aspectos que se avanzaron en los últimos dos años.
En contraparte, el magistrado presidente también apuntó una serie de retos que enfrentará el magistrado Hugo Gama Coria, quien fue electo por unanimidad para relevarle en la presidencia.
En este contexto destacó que a partir de las normas internas que se han implementado se han generado economías o ahorros, pero además se han cerrado las puertas a determinaciones discrecionales.
Sin embargo, otro de los aspectos relevantes es el Servicio Civil de Carrera que está por aprobarse por el pleno del Tribunal, lo que permitirá que sean contratados sólo los que tengan méritos y capacidades para ocupar dichos cargos y no por recomendaciones.
“Un presidente del tribunal no es jefe de sus pares, es simplemente quien ejecuta los acuerdos del pleno, del órgano colegiado”, explicó.
El presidente “sí hace algunas propuestas, tiene posibilidad de diseñar algunos criterios, pero el órgano colegiado es el que decide lo que se va a hacer”, insistió.
Un tribunal de cualquier materia tiene una agenda pre señalada por la Constitución, por la ley, “su tarea sustantiva es impartir justicia, y todo lo que hagas tiene el propósito de fortalecer y hacer eficaz esa prestación del servicio jurisdiccional”, enfatizó el magistrado presidente.
No sólo en los últimos dos años, que él ha estado al frente, sino también desde antes, en el Tribunal se han ido tomando decisiones para fortalecer tareas administrativas y financieras, con la finalidad de generar una mejor prestación del servicio de justicia administrativa, esto a partir del desarrollo de normativas internas que le permiten al mismo organismo que no se tomen decisiones arbitrarias o a partir de ocurrencias, sino que sean fundamentadas en reglamentos, con lo que se evita que alguien haga uso indebido de sus atribuciones.
Dijo que está por aprobarse el lineamiento del servicio civil de carrera, “con lo que se cumplirá una vieja disposición que establece que nadie puede ingresar si no es por concurso, en categorías de jurisdicción”, con lo que se le da certeza a la sociedad y a los trabajadores, “porque será el mérito lo que los llevará a ejercer la función y no la recomendación, que no estoy en contra de ello, pero creo que la sociedad espera son profesionistas de mérito”.
Sobre ello “se presentó el proyecto y se espera que se aprueben los lineamientos para que el servicio civil de carrera comience a operar el próximo año”.
Jesús Sierra dijo que “tener una plantilla laboral calificada nos da una doble dimensión: la certeza a la sociedad de que están en manos de personas que conocen y pasaron procesos de certificación y a los trabajadores la certeza de que solo se les moverá del espacio si hay una causa justificada”.
Para esto, explicó, durante varias sesiones de trabajo los magistrados estuvieron participando en la construcción del proyecto, debido a que todos están en el mismo compromiso.
Por ello, dijo, “la persona que asuma, es importante que quede subrayado, hay una agenda institucional con todas la normativas, hay un diseño; la persona que releve tendrá que ejecutar lo que existe, las obligaciones que generan esta normativa, y cumpliendo con lo que todavía falta”.
De esta manera reconoció que todavía falta avanzar en la descentralización de los servicios del tribunal. Actualmente se tienen juzgados en Uruapan, y faltaría en Zamora, Lázaro Cárdenas y Zitácuaro, y con ello “le daríamos a las personas la posibilidad de tener más cerca a un tribunal para atender los asuntos que les afecten”.
Actualmente, abundó, con las economías que se han generado se tiene una construcción con recursos propios, de instalaciones para un juzgado en Zamora, dependiendo de los recursos que pudiéramos tener se podría hacer un esfuerzo el año siguiente o el subsecuente”, por lo que consideró que este es un paso que podría estar muy cerca de darse.
