Por Martín Equihua
Don Lorenzo Córdova Corleone y su siciliana familia del INE que se cree intocable, ha lanzado un nuevo exhorto a la ciudadanía para que defienda la democracia, según dice, al tiempo que confirma que interpondrá recurso ante la suprema de las supremas familias, para que no le muevan sus privilegios, siempre bajo el argumento de que él y su INE son neutrales, lo que afirma besando la cruz en sus dedos.
Lo dicho. Olvidó don Lorenzo –propuesto e instalado por el exesposo de La Gaviota– que él y su familia fueron contratados como árbitros, y que los silbantes no cobran faltas de jugadores que se distinguen por su uniforme, como acá los partidos políticos por su nombre e ideología. El árbitro pita y punto. Pero no, el remedo de don Vito Corleone, ha tiempo que se enfundó el uniforme del equipo opositor, y abiertamente se ha sumado al activismo. Ayer mismo, en la presentación de su libro La Democracia no se toca, convocó “a los ciudadanos a emprender acciones para defender la democracia”.
Por suerte, y contra la cantaleta opositora de que hay polarización, lo cierto es que la sociedad está más informada y politizada, y especialmente aquellos sectores históricamente ignorados por las familias del poder.
Perversidad de a metro
La Fiscalía General de la Ciudad de México determinó que el choque de vagones del Metro donde perdió la vida una joven, fue una acción provocada de manera dolosa, al tratarse de una intencional ruptura de cables “mediante el uso de fuego y herramientas”; sumada a la imprudencia del conductor. De los incidentes “atípicos” de las semanas siguientes, el Sistema Colectivo del Transporte Metro también ha denunciado la intencionalidad maligna.
Por supuesto que debe investigarse a fondo, y por el bien de todos, se debe erradicar esa oscura perversidad de estrategas políticos que, al costo que fuera, quisieran alterar la tendencia de preferencias en el país.
El hecho se encadena al atentado contra Ciro Gómez Leyva, en torno al cual los opositores han querido ganar puntos. El propio Ciro, indignado, contesta a otras ligeras acusaciones, de que es claro que él no se mandó matar a sí mismo. Parece comprensible, porque, aunque ha sido su gran tema contra el presidente y la 4T, resulta obvio que él mismo no se mandó a ejecutar –aunque los calibres usados hayan sido los justos para ser rechazados por el blindaje de su camioneta–, pero el efecto político del lamentable suceso, sí lo pudo haber planeado alguien con quien comparte posiciones políticas antiAMLO. Sin duda.
Por ello, debe cuidarse que prevalezca el argumento y el sentido de las palabras; el debate moderado y la tolerancia, porque al fin, se trata de adversarios, no de enemigos. A todos conviene detectar a tiempo a quienes operan desde la oscura perversidad. El fin de conservar o conquistar el poder, jamás justificará el uso de cualquier medio.
El juicio a García Luna
Continúa hoy el juicio a García Luna, sin que hasta ahora haya logrado las ocho columnas de los medios que añoran tiempos de abundante cosecha chayotera, y que hoy no pierden oportunidad de estar, todos los días, como cuchillito de palo: dale que dale y no corta.
Dichos medios del cuchillito –Reforma, El Universal, Televisa, Milenio y otros–, han preferido resaltar el argumento de la defensa contra la calidad moral de los testigos, unos criminales de alcurnia. Sin dejar de ser cierto, quieren ignorar que se trata de relaciones entre delincuentes, y no de un funcionario honesto y émulos de Teresa de Calcuta y sus misiones de caridad.
Del año nuevo purépecha
El año nuevo purépecha es un movimiento cultural en el que han confluido miles de personas, inspiradas en ancestral ritual prehispánico, rescatado por estudiosos medio siglo atrás. En los últimos años, su órgano rector ha venido refinando sus valoraciones, y en él se viene imponiendo una línea anti religiosa, anti partidaria y antigobiernista. Según estos puritanos, los auténticos purépechas son los que están fuera de partidos políticos, de la influencia de la iglesia católica y otras organizaciones religiosas, y preferentemente, fuera también de la órbita gubernamental. Si además ponen los ojos en blanco cuando le soplan al caracol, mejor.
Pobre manera de apreciar, y de no reconocer que es en su diversidad, bajo una misma matriz cultural, donde está la verdadera riqueza del pueblo purépecha, como del resto de casi 70 pueblos indígenas contemporáneos, a los que se adscriben más de 25 millones de mexicanos.
Por cierto que desde el gobierno estatal continúa la fantasía de “los autogobiernos” y un tal respeto a la autodeterminación, nomás porque han facilitado el cacaraqueado “presupuesto directo”. Lo que se requiere, en el país, es una cirugía mayor para que los pueblos indígenas se hagan presentes en todos los órganos del poder institucionalizado del Estado, desde el Ejecutivo Federal, el Congreso de la Unión, la Suprema Corte de Justicia y sus contrapartes estatales… O sea, una justicia real, inclusiva en las instancias de poder; una reparación histórica a una exclusión de raíz, y no sólo las migajas cacaraqueadas.
P.D. Hoy desfilarán aspirantes presidenciales de Morena y aliados, ante su fracción parlamentaria de diputados. Cuatro varones que podrían continuar la lista cercana a ochenta presidentes de la República, por un lado; y también la que pudiera ser la primera mujer presidenta en la historia nacional: Claudia Sheinbaum, quien ha contestado a acusaciones, que sí es un peligro, pero para quienes quieren reinstalar la corrupción y el saqueo.
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