Los resultados del periodo 2017-2018 confirman la variación con tendencia a la baja de la población de este insecto que migra todos los años desde Canadá y Estados Unidos hasta nuestro país, donde pasa un periodo de hibernación en Michoacán y el Estado de México.
Actualmente se tienen nueve colonias de mariposa Monarca entre los diferentes santuarios que dan cobijo al invertebrado.
Son los ciclones, heladas y frentes fríos los que parecen interferir en el tránsito de la mariposa al territorio mexicano.
F.1 director del Fondo Mundial para la Naturaleza (wwf, por sus siglas en inglés) en México, Jorge Rickards, indica que “estos fenómenos climáticos sin duda tienen un impacto en la migración”.
Señala que esta deducción surge también al observar que la tala de árboles ilegal en el hábitat de la mariposa en México ha disminuido considerablemente, pero la población sigue a la baja. “México ha hecho su tarea en cuanto a control de la tala, pero no está libre de los fenómenos globales que implica el cambio climático”, asegura.
Sin embargo, el comisionado Del Mazo comenta que “esta temporada se cree que hubo una mayor densidad”, aludiendo a un cálculo aproximado de 37.5 millones de ejemplares por hectárea.
“En general las concentraciones por hectárea fueron mayores.
Esto se sabrá cuando tengan los datos del sistema lidar”, precisa, en referencia a una tecnología digital que permite contabilizar con exactitud el número de individuos de mariposa Monarca.
Este año se cumplen 25 años de monitoreo formal desde que se iniciara en 1993. Desde entonces la población ha presentado variaciones y en ocasiones ha arrojado números alarmantes, como en 2013, año en que se reportó una cobertura de solo 0.67 hectáreas.
Los especialistas señalan que lejos quedaron los registros que indicaban la salud poblacional de la Monarca en México, cuando en 2003 se reportaron once hectáreas ocupadas.
Por ello Rickards lanza un llamado a la calma y puntualiza que “todas las poblaciones sufren disminuciones y aumentos, dependiendo de las características”. Aun así, reconoce, “en general la población de la mariposa Monarca de América del Norte presenta un declive”.
Al respecto el jefe ejidatario del Santuario El Rosario, en la región oriente de Michoacán, Homero Gómez González, dice que aún se carece de investigación real sobre las amenazas a las que se enfrenta la mariposa Monarca en los bosques de México.
Durante el Quinto Simposio de Investigación y Conservación de la Mariposa Monarca el representante ejidal asegura que aún no se han realizado investigaciones para contrarrestar la aparición de plagas que en los últimos años se han convert ido en la amenaza número uno para la Monarca.
“La tala ilegal ha pasado a la historia. Lo que ahora se requiere es que haya mayor interés del gobierno para hacer grandes reforestaciones, producir plantas de calidad y que también todos trabajen unidos, porque se hace mucha investigación pero cada quien por su lado”, expresa.
Anualmente, informa, se reforestan cerca de mil hectáreas de bosque en el santuario El Rosario en un intento por contrarrestar la pérdida de casi 30 mil hectáreas por año, tanto debido al cambio de uso de suelo como a la tala clandestina.
Polinización Por otra parte, a fin de continuar documentando a la danaus plexippiis, expertos de México y Estados Unidos dieron a conocer que han iniciado una investigación científica sobre los efectos que tiene la polinización de la mariposa Monarca en su ruta migratoria, la cual comprende hasta cuatro mil 200 kilómetros en los que existen diferentes ecosistemas.
Los estudios iniciaron en marzo, cuando la mariposa hiberna en los bosques de Michoacán y el Estado de México antes de volar de regreso a Estados Unidos y Canadá.
Y es que durante su viaje a México la mariposa traslada polen a diferentes ecosistemas, pero el impacto que tiene este fenómeno en millones de plantas y flores de Canadá, Estados Unidos y México no se ha estudiado, pese a que 85% de las plantas que consume el ser humano son polinizadas.
La segunda parte de la investigación se hará en agosto de este año en territorio mexicano, cuando el lepidóptero migre desde esos dos países de Norteamérica, informa por su parte el biólogo Eduardo Rendón Salinas, coordinador en jefe de Corredores Silvestres del wwi1” México.
En México la investigación la encabezará wwk en coordinación con la Universidad de Qucrétaro y el Instituto de Investigaciones en Ecosistemas y Sustentabilidad (iies) de la Universidad Nacional Autónoma de México campus Morelia.
Rendón Salinas detalla en entrevista que se espera tener en año y medio los primeros resultados de la investigación. “Los últimos informes que nos ha dado el comité trilateral científico nos llevan a pensar que en un año o año y medio podremos acercarnos a temas de números de mariposas por hectáreas”.
Detalla que para el análisis se invertirán alrededor de dos millones de pesos que aportará WWF México.
De acuerdo con los organizadores el análisis se llevará a cabo por medio del uso de una técnica molecular llamada metagenómica, que examina las muestras de polen colectadas por las mariposas durante su migración desde Estados Unidos y Canadá.
De esta forma se determinarán los ecosistemas que ha visitado dicha especie.
Disminuye la población de mariposa monarca
