-Al reunirse con integrantes de la organización de redes y referencias empresariales BNI capítulo Valladolid, destacó que se debe transitar hacia un modelo político que nos permita alcanzar una vida democrática plena, y que impulse el desarrollo económico y social
Redacción
Con fuerza fortaleceremos a las y los emprendedores del estado y del país, quienes son grandes generadores de la economía, recalcó Araceli Saucedo Reyes, candidata al Senado de la República de la Coalición Fuerza y Corazón por México.
Al reunirse con integrantes de la organización de redes y referencias empresariales BNI capítulo Valladolid, la candidata destacó que se debe transitar hacia un modelo político que nos permita alcanzar una vida democrática plena, y que impulse el desarrollo económico y social con equidad y justica.
“Como senadora de la República trabajaré para que las finanzas públicas permitan el impulso de un fuerte crecimiento de la economía nacional; aprovechamiento de las ventajas competitivas que México tiene frente al resto de los países para sostener un 6% de crecimiento anual y la creación de 1.2 millones de empleos anuales, meta que sí es posible bajo la ruta que nos hemos planteado dentro de la Coalición Fuerza y Corazón por México, y que con Xóchitl Gálvez en la presidencia haremos realidad”.
Araceli Saucedo recalcó que la política económica debe articular al mercado interno y el mercado externo como dos motores del crecimiento sostenido y el tránsito de una economía de grandes rezagos tecnológicos e industriales a una economía con alta productividad tecnológica, plenamente desarrollada con justicia social.
“Tenemos la intención de generar programas de fomento económico, bajo una perspectiva de respeto y promoción de las inversiones privadas, las empresas de propiedad social y coordinación con las empresas de propiedad estatal, que se concretará en la celebración de acuerdos estratégicos para el crecimiento económico, fomento de las actividades agropecuarias, industriales y tecnológicas”.
La candidata abundó que se debe estimular el crecimiento de las inversiones productivas privadas, públicas y sociales, disminuir la especulación financiera y generar empleos formales con altos salarios, pues el incremento al salario mínimo por sí mismo no resuelve el problema en un país en donde la mayoría de su fuerza laboral se desarrolla en la informalidad.