Raúl López Téllez
La desaceleración en el envío de remesas a Michoacán es más pronunciada en zonas con mayor inseguridad pública, de acuerdo a un estudio del Colegio de Economistas del Estado (CEEM), el cual destaca que como reflejo de una situación que se repite en 27 estados del país, en la entidad la captación estos recursos ha entrado en un proceso de lentitud en su dinamismo.
El coordinador de Proyectos Estratégicos del CEEM, Heliodoro Gil Corona, destacó como efectos de mayor impacto la disminución de remesas en Morelia, en la región Cuitzeo; en Uruapan, en la zona de la Meseta Purépecha; Lázaro Cárdenas, en la región Sierra Costa, y Múgica en la región del Infiernillo.
La desaceleración en Michoacán, indicó el especialista, respecto al primer semestre del 2018 registra una disminución de 12.1 por ciento a 1.9 por ciento, lo que impactará el crecimiento estatal al ser parte fundamental de la economía familiar. “En 2018 las remesas familiares representaron el 11.6 por ciento del Producto Interno Bruto Estatal y el 92.0 por ciento de los ingresos ordinarios del gobierno estatal”, con un cálculo previsible de que en este año pudieran alcanzar solo el 50 por ciento de los mismos.
A nivel de regiones, dijo, llama la atención “que tuvieron mayor baja aquellas donde hay los mayores índices de inseguridad pública, ese es el fenómeno que observamos respecto al primer semestre del año pasado”. De los municipios que encabezan esas regiones, es donde se dan los mayores índices de inseguridad. “Hoy Morelia está impregnado por el fenómeno de inseguridad en distintos órdenes”; en Uruapan, ocurre lo mismo, al igual que en Lázaro Cárdenas, “un espacio territorial en Michoacán con muchos conflictos”; en el caso de la región del Infiernillo destacó el caso de Múgica.
El análisis señala que en términos absolutos, las remesas en Michoacán “suben apenas en 30.5 millones de dólares, al pasar de mil 640.6 millones de dólares a mil 671.1 millones de dólares respectivamente”. Desde el 2017, señaló el analista, hasta el 2019, el comportamiento de las remesas en pesos, manifiesta una desaceleración al pasar de 17 por ciento a 10.1 por ciento y a 3 por ciento. “Esto quiere decir que el nivel de remesas captadas pasan de 28 mil 453 millones a 31 mil 324 millones y 32 mil 259 millones de pesos” en estos años. De mantenerse la tendencia, “el mercado interno lo va a resentir”, al ser las remesas el detonante no sólo como soporte hasta en 92 por ciento de la economía familiar
De las causas de esta desaceleración, Gil Corona citó la situación de hostigamiento que viven los latinos en el vecino país del norte, clima de inseguridad que los lleva a retener recursos ante posibles eventualidades; la resistencia de michoacanos a retornar al estado; el tipo de cambio, que se ha mantenido en un promedio de 19:00 pesos por dólar en la paridad y, el clima de inseguridad.
Sobre el caso de si la disminución en las remesas también hablaría de una mayor expulsión de mano de obra a los Estados Unidos, el especialista destacó que considera que más bien se ha dado un fenómeno de cohesión familiar, al migrar familias enteras.
Desaceleración de remesas, mayor en zonas con alta inseguridad en el estado
