Por Héctor Tapia
Desde atrás, cual director técnico, Jesús Reyna observó la lectura del posicionamiento de la expresión que lidera. Guión en mano, Cuauhtémoc Ramírez planteó las razones del rompimiento político electoral con el PRI.
Fueron cautos en no decir que era renuncia, aunque muchos ya leyeron de manera anticipada qué es lo que se avecina.
El argumento, que en las dirigencias estatal y nacional del PRI no se respetaron los acuerdos. Pero, nadie toma una decisión de este tamaño por que sí, o simple idealismo, y por el tamaño del anuncio, se antoja pensar que la ruta ya tiene tiempo trazada, definida y sólo se esperaron los tiempos.
Reyna dijo claramente de manera pública que “valora” renunciar al PRI, pero entrelíneas la lectura es que es algo decidido, y por tanto sus afines también están recibiendo una indicación sin serlo, literalmente.
Lo que está por venir en el PRI, de manera interna, aceleraría un proceso de descomposición interna que pegaría directamente a su peso a la hora de poner las canicas sobre la mesa a la hora de buscar una eventual alianza electoral; quedarían mermados.
El grupo que lidera Reyna anticipa que el próximo viernes la Comisión Permanente del PRI en Michoacán instalará una Comisión de Postulación, la cual integrarán 7 priístas, quienes son los que decidirían las candidaturas locales en el partido; serán 7 personas en las que recaerá esta responsabilidad, y no en la base.
¿Qué perfiles se manejan para esta Comisión de Postulación?, entre los nombres que se barajean están los de los ex gobernadores Víctor Tinoco, Salvador Jara, pero aun faltan por definirse. Imposición y desprecio a la militancia, dicen los reynistas, anticipando la exclusión que enfrentan y que, advierten, se irá profundizando. Por ello, dicen, no quieren ser partícipes de estas determinaciones.
La ruptura de Jesús Reyna y su grupo con el partido era punto de quiebre se venía esperando. En otras palabras, estaba “entrelíneas” anunciado. En el hasta ahora su partido lo dejaron solo, casi abandonado, en el momento más crítico de su vida política y personal, cuando fue detenido y posteriormente exonerado. Ha dicho reiteradamente que él no guarda odios ni rencores. Pero, tampoco olvida.
En esta ruta el grupo, ahora conocido y conformado como Crisol Michoacano, intentó postular una planilla para el Consejo Estatal, y fue internamente en el PRI, de nueva cuenta, bateado. Aceleró la descomposición interna.
Desde que salió la pregunta silenciosa que sigue a la espera de resolverse, y que siempre ha quedado en el aire, es a quién apoyará toda esa estructura que podría acuñar en el estado. La indicación es clara: al PRI no, ni a ninguno de sus candidatos.
Pero entonces, con todo este contexto, por qué o ¿de dónde surgen los nombres del morenista Raúl Morón y del priísta Valentín Rodríguez?
El grupo que lidera Reyna ha sido cauto en desvelar hacia dónde apuntarían; pero, para el particular de Raúl Morón, cuando el presidente municipal de Morelia fue senador estuvo pendiente del ex gobernador interino priísta cuando fue detenido por la oleada de detenciones que se dieron en el periodo de Alfredo Castillo, acusado por las detenciones arbitrarias que se dieron por paquete.
Las atenciones que tuvo Morón Orozco valieron el especial agradecimiento público que hiciera Jesús Reyna cuando salió exonerado de prisión, agradecimiento que hizo también en primer momento al presidente Andrés Manuel López Obrador.
“Guardo profundo agradecimiento, pero no compromiso, pues intervinieron sin pedir nada a cambio, lo cual enaltece más su actuar”, dijo el 23 de enero del año pasado. Después de eso han trascendido algunas reuniones. Pero nada más.
Sin embargo, de manera paralela, por otro lado, hay elementos que llevan a pensar que se decantaría por respaldar una eventual candidatura de Valentín Rodríguez, quien hace unos meses acudió a Reyna García a “pedir permiso” para buscar la candidatura al gobierno del estado.
En esa ocasión, en Tacámbaro, el empresario le externó a Jesús Reyna su intención, y “ver” si no chocaban intereses. Desde entonces, Valentín Rodríguez ha dado pasos claros y constantes en la ruta de conseguir la candidatura. Aunque se ha manejado como una carta del PRI, y como un eventual perfil que podría impulsarse a encabezar la alianza con el PAN y PRD, alianza todavía incierta.
La hipótesis de respaldo de Reyna a este último perfil se refuerza a partir de algo simple, “Crisol de ideas” lleva la comunicación institucional y política de Valentín Rodríguez y a su vez, a partir de ahora, se destapa como la línea de comunicación institucional también de “Crisol Michoacano”, como parte de un mismo proyecto político. Habrá que esperar y ver qué rutas se van marcando.
